Así fue el brutal asalto a un kebab en Torre Pacheco por grupos ultras armados con bates
Un grupo de entre 40 y 50 encapuchados destrozó el local de Hassan, un inmigrante sin antecedentes, en una zona alejada del despliegue policial donde han ocurridos los incidentes más graves
Aitor Echevarría
Martes, 15 de julio 2025, 10:08
Un grupo de más de cuarenta hombres vestidos de negro, muchos de ellos encapuchados y armados con palos, irrumpió el domingo por la noche en un kebab de Torre Pacheco, causando graves daños materiales. El ataque, perpetrado por ultras que gritaban «¡Cierra el local!», forma parte de la ola de tensión que sacude la localidad desde que el pasado viernes un jubilado, Domingo, fuera brutalmente agredido por un joven. La paliza desató una espiral de odio que ha atraído a grupos neonazis de fuera del municipio con el objetivo de hostigar a la población migrante.
El restaurante, propiedad de Hassan, un vecino marroquí con una década de residencia pacífica en el pueblo, fue asaltado con gran violencia. Según relató el propio dueño, los agresores comenzaron a destrozar todo a su paso, dejando cristales rotos, muebles destrozados y frigoríficos volcados. A pesar del impacto del ataque, no se registraron heridos, aunque sí cuantiosos destrozos materiales. Ninguno de los asaltantes ha sido detenido aún.
🔴 Así atacó anoche el restaurante Don Kebab, de Hassan, una turba de ultraderechistas, todos de fuera de Torre Pacheco. Los daños materiales son cuantiosos. Usaron gas pimienta, machetes y palos. Llevaban cascos y caras tapadas. Hassan patrocinaba un equipo local de fútbol sala. pic.twitter.com/ph5p5vwue0
— Islam en Murcia (@islamenmurcia) July 14, 2025
El ataque ocurrió lejos del cinturón de seguridad que la policía mantenía en torno al barrio de San Antonio, donde reside la mayoría de la población migrante. Este desvío permitió a los agresores actuar con impunidad en una zona sin vigilancia intensiva. Testigos aseguran que fueron entre 40 y 50 los individuos que participaron en el asalto, muchos con estética ultra, rostros cubiertos y armados con objetos contundentes. Tras causar los destrozos, abandonaron el lugar sin ser interceptados.
El miedo y la indignación aumentan ahora entre los comerciantes extranjeros del municipio. Hassan, visiblemente afectado, aseguró que nunca había vivido algo así en sus diez años en España. «Nos querían matar... Menos mal que tengo una puerta trasera y por ahí pudimos escapar», declaró.
