Vacunarse contra la gripe protege la salud cardiovascular tanto como dejar de fumar
Los vacunólogos aseguran que inmunizarse ahora no solo evita miles de muertes por infección respiratoria sino que protege contra otras dolencias muy graves
Vacunarse contra la gripe y contra la covid este otoño no solo es un acierto porque minimizará las posibilidades de ser uno de los miles de españoles que ingresarán en un hospital o fallecerán este invierno como consecuencia de una infección respiratoria sino porque aporta muchos otros más beneficios a la salud.
Como destaca la Asociación Española de Vacunología en la campaña de sensibilización ciudadana que acaba de lanzar, el escudo que se logra con las vacunas contra las infecciones respiratorias protege también al organismo de forma genérica y reduce el riesgo de sufrir otras patologías muy graves, fundamentalmente dolencias y accidentes cardiacos y del sistema circulatorio. Un dato revelador. Los científicos han documentado que vacunarse contra la gripe protege tanto la salud cardiovascular de los adultos como dejar de fumar.
Con el lema 'El mejor plan para este invierno, vacúnate', la campaña que difunden este mes en toda clase de medios de difusión, incluidas las redes sociales, busca convencer a los indecisos, a través de una cascada de argumentos y datos científicos, del error que cometerán si este otoño no acuden a inmunizarse a los centros y puntos de vacunación públicos de su autonomía cuanto antes.
Lamentan que poco más de un tercio de los sanitarios se vacune y urgen a pincharse a quienes corren más peligro: mayores, grupos de riesgo y niños
El mensaje va dirigido fundamentalmente a los grupos de mayor riesgo frente a estas patologías, los mayores, los niños, los enfermos crónicos e inmunodeprimidos, las embarazadas, y también a un colectivo clave para frenar los brotes, el personal sanitario que trabaja de cara al público. A los mayores de 60 años y enfermos de riesgo les recomiendan que se vacunen ya contra la gripe y que comprueben si tienen actualizada la vacunación contra el neumococo (la principal causa de neumonía mortal en mayores), a los mayores de 70 años les recomiendan también pincharse contra la covid y a los padres que inmunicen contra la gripe a todos los niños de entre 6 meses a 5 años. Lamentan que en la actualidad no llegan a cuatro de cada diez los sanitarios que se vacunan contra la gripe (39%), poco más de la mitad de los que lo hicieron el año del estallido de la pandemia. Esto ocurre cuando, para protegerse a sí mismos y sobre todo para reducir las posibilidades de contagiar a sus pacientes, deberían alcanzar una cobertura de al menos el 75%.
La campaña, que cuenta con el respaldo explícito de numerosas sociedades médicas, como los pediatras, los neumólogos y los doctores de familia, empieza por destacar lo obvio. Vacunarse contra la gripe dificulta el contagio personal y las dimensiones que alcanzará la epidemia invernal en España de una enfermedad que cada año causa casi 30.000 hospitalizaciones, unas 2.200 entradas en la UCI y no menos de 1.600 muertes.
No es una infección banal
De forma muy especial se dirigen a los padres con niños pequeños y les piden que no banalicen la gripe, algo que en España ocurre en parte pues no se inmuniza ni a la mitad de los menores de cinco años, los de mayor riesgo. Le dan dos datos para que reflexionen. Cuando hasta 2023 la vacunación de los niños no estaba en el calendario sanitario español, más de 4.000 pequeños acababan cada año hospitalizados y cientos morían. El segundo hecho constatado es que el que el 80% de los menores de 5 años que tiene gripe y termina hospitalizado es solo por la infección, no por la complicación de enfermedades previas.
No obstante, los vacunólogos han querido dar este año un paso más. Contar cómo estas vacunas protegen, sobre todo a los adultos, contra múltiples enfermedades. Vacunarse contra la gripe recorta en un 35% el riesgo de sufrir accidentes cardiovasculares en los doce meses siguientes al pinchazo, rebaja entre un 12% y 16% el riesgo de trombosis cerebrales (ictus isquémico) y, en pacientes con hipertensión, reduce un 18% la posibilidad de muerte por cualquier motivo. Pero es que también ocurre lo contrario. La infección por neumococo y gripe dispara un 30% los accidentes cardiovasculares y la infección por covid aumenta a corto plazo, y mucho, el riesgo de fallo cardiaco o de la aparición de trombos. Vacunarse contra el coronavirus minora un 82% el riesgo de muerte en pacientes con insuficiencia cardiaca.
Los beneficios cardiovasculares son las más evidentes, pero también hay estudios que apuntan entre otras ventajas de la vacunación que inmunizarse contra la gripe y el neumococo rebaja el riesgo de desarrollar alzhéimer y otras demencias.