Los vecinos de La Montaña estallan contra el coto y la ruta del Cuaternario

El blindaje de estas fincas como Área de Protección Ecológico Patrimonial libre de cualquier actividad cinegética permitida en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), en el caso del coto, y la conservación del monte, hablando de la ruta, centran los argumentos de estos vecinos de La Montaña, decididos a unir fuerzas con el resto de colectivos que se oponen y solicitar un encuentro con el Ayuntamiento esta misma semana: «De base, no queremos que toquen el monte».

La declaración es de Raquel Martínez, presidenta de la Asociación de Vecinos de La Montaña. Se hace eco de la opinión de los cerca de cuarenta torrelaveguenses que acudieron a la reunión este domingo y del rechazo que también le han trasladado otros tantos en las calles de la localidad. El rechazo, traslada, es «unánime» entre los residentes y ninguna de las noticias y novedades sobre ambos proyectos ha caído bien en el pueblo estos días.

Ni las del coto, que llaman a «detener» y «evitar así la demanda por prevaricación administrativa» dado el carácter protegido de la zona; ni las de esta ruta del Cuaternario con esculturas de mastodontes y tigres de dientes de sable, que «no ha contado -tampoco- con la opinión de los vecinos» y al que asocian todo tipo de «perjuicios». Hablan, por ejemplo, del entorpecimiento de los caminos, utilizados de forma frecuente para mover ganado, la circulación de tractores y por los propios vecinos de camino a casa.

Asociado a este tráfico de turistas o visitantes vinculado a la ruta familiar, y en el contexto de la eliminación del aparcamiento proyectado originalmente para facilitar la llegada de visitantes -tras el proceso de alegaciones y la resolución de la Comisión Regional de Ordenación del Territorio y Urbanismo (Crotu)-, los vecinos de La Montaña manifiestan también sus dudas por el paradero definitivo de estos vehículos: «No sabemos dónde pretenden aparcar todos esos turistas que esperan que lleguen».

La idea es que estos visitantes jamás coincidan con los cazadores, conciliando el uso turístico y cinegético de estas fincas de La Montaña de manera ordenada. El calendario oficial de caza en Torrelavega fija al menos catorce batidas entre el término municipal, todas entre septiembre y febrero; el último cronograma (2024-2025) acotó la temporada cinegética entre el 9 de septiembre y el 23 de febrero. ¿Y qué se caza en el Dobra? Mayoritariamente jabalíes, que es la especie a la que se destinan trece de las catorce salidas en este calendario. Solo una, la anteúltima cita, en febrero, está orientada a la caza de corzos. Un dato importante: todas estas fechas cayeron en domingos -alternos y seguidos, según la fecha- desde septiembre a febrero de este año.

Habrá que ver cómo queda configurado el calendario siguiente (2025-2026). Por lo pronto el Ayuntamiento de Torrelavega ya ha dejado claro que las visitas a la ruta del Cuaternario y la actividad de los cazadores será compatible. O mejor dicho, no coincidente. Mientras haya batidas, este itinerario valorado en unos 160.000 euros y financiado con dinero del Plan de Sostenibilidad Turística estará cerrado, evitando cualquier tipo de riesgo para la seguridad de los visitantes.

No han sido pocas las voces que han enmendado esa tesis. Por lo pronto, refutan, los terrenos afectados ya estarían blindados ante cualquier uso cinegético gracias al Modificado Nº53 del PGOU aprobado en 2016. En él, y hablando del «Área de Protección Ecológico-Patrimonial del Pico de la Capía», la Corporación se cuidó de «prohibir todo tipo de actividades cinegéticas». Los colectivos ecologistas, además, también aluden a lo establecido en la Ley de Caza de Cantabria, «que obliga a priorizar la seguridad ciudadana y la conservación de la fauna», como citan.

Mientras las reacciones -todas críticas- de vecinos, partidos políticos y colectivos ecologistas se suceden, la maquinaria administrativa municipal ha seguido su curso y escuchando ofertas tanto para crear la ruta como licitar la explotación cinegética de estos terrenos -caducada el pasado mes de marzo-. Lo adelantaba El Diario la semana pasada y ya se ha hecho oficial: dos empresas, Senor y Europea de Ingeniería y Obra civil, pujan por este contrato con sendas ofertas de 155.020 y 159.179 euros. La Mesa de Contratación trabajará en los próximos días para decantarse por una de las dos, acelerando así la llegada de estas tareas a las faldas del Pico de la Capía.