De la UC a Cambridge con dos becas de excelencia para investigar en genética
Ana Moreno, egresada de la primera promoción de Ciencias Biomédicas, sueña con abrirse camino en la academia. «Ojalá algún día pueda tener mi grupo de investigación»
A Ana Moreno Barriga (Cáceres, 2002) le hacía «mucha ilusión» vivir cerca del mar, así que Santander tenía bastantes puntos en su ranking de destinos ... universitarios. «La ciudad me encantaba». No obstante, en su elección final pesaron claramente su interés genuino por «por estudiar y entender la naturaleza humana, desde lo más pequeño», así como el proyecto del grado de Ciencias Biomédicas que la Universidad de Cantabria (UC) estrenó en 2020. «Vi el programa, me gustó y lo elegí», resume Moreno, que aterrizó en Santander con el comienzo de la década y a mitad de la misma se encuentra a punto de empezar una más que prometedora etapa vital en Cambridge (Reino Unido), donde, durante los próximo cuatro años, realizará su doctorado gracias una beca Herchel Smith. Se trata de una ayuda muy competitiva, que solo logran cada año un máximo de ocho personas entre Cambridge y Harvard. «Es un proceso duro, sobre todo, desde el brexit; es muy cansado y complejo, pero también enriquecedor», admite Moreno, que ya pudo cursar en el campus británico su máster de Investigación en Ciencias Biológicas gracias a otra beca de prestigio que, en este caso, le concedió la Fundación la Caixa.
El plan de estudios y las clases del profesor Álvaro Rada fueron muy importantes para Moreno: «Trabajo en epigenética gracias a él»
Su camino académico comenzó en el campus de Las Llamas. Formar parte de la primera promoción de Ciencias Biomédicas de la UC entrañó un extra –«hubo que organizarlo todo» desde cero y «la adaptación fue complicada»–, pero «todos se esforzaron mucho y contaron en todo momento con nosotros, con los alumnos, así que ha merecido la pena».
Las asignaturas sobre biología molecular y genética ensancharon sus horizontes académicos y también sus ganas de saber más. «Me encantaba el estudio de los genes, cómo es la regulación». Y la motivación también fue decisiva. Moreno encontró un aliciente en las clases del profesor Álvaro Rada, investigador en el Instituto de Biomedicina y Biotecnología de Cantabria (Ibbtec) y uno de los cinco científicos ligados a la UC que han logrado una ayuda europea ERC, tan reputadas como rigurosas. El profesor Rada le habló de epigenética. «Me encantaron sus clases, fue un antes y un después, se podría hablar de ciencia abiertamente, transmite mucha pasión y te invita a amar la ciencia. Ahora trabajando en epigenética gracias a él», cuenta con agradecimiento.
El máster lo realizó al abrigo de la Caixa –buscó y se postuló para ir a Cambridge con financiación completa– en el laboratorio de la profesora Anne Ferguson-Smith. La investigadora se alegró muchísimo cuando Moreno se hizo luego con una ayuda Herchel Smith, cuyo proceso es complejo, además de tremendamente competitivo. «En mi laboratorio se enteraron primero y casi me montaron una fiesta. Tengo un laboratorio estupendo» con el que seguirá adelante en la fase del doctorado. ¿Sobre qué trata? «Trabajamos en 'impronta genética' –en español suena un poco raro–» y consiste en investigar «cómo los genes que vienen heradados de padre y madre se diferencian a través de marcas epigenéticas. Y estudiando esas marcas vemos cómo se regula el encendido y apagado de los genes», resume. Es investigación básica, que Moreno reivindica, pero tiene una más que probable aplicación biomédica porque está en relación «con muchas enfermedades». «Cualquier conocimiento que obtengamos se podrá aplicar» en los ámbitos del cáncer y las enfermedades congénitas de desarrollo embrionario.
Moreno tiene cuatro años por delante en Cambridge, una ciudad que es una «burbuja» en el Reino Unido, con un singular sistema de 'colleges' muy al estilo Harry Potter, explica con gracia. «Es muy bonito, conoces a mucha gente, es un ambiente internacional y con gente realmente brillante... Es superenriquecedor». Confía en aprovecharlo. Y en dar un paso más. «Quiero seguir en la academia. Ojalá algún día tener mi propio grupo de investigación».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión