Los comercios hacen caja con los aguaceros
Chubasqueros, paraguas y botas copan las ventas bajo las intensas lluvias con las que Cantabria estrena el otoño
Tan rápido ha llegado el otoño que a muchos no les ha dado tiempo a hacer el cambio de armario. Los chaparrones con los que ... este lunes irrumpió el mal tiempo –en Santander cayeron hasta 91 litros por metro cuadrado en una cifra que no se igualó en toda España– obligaron a muchos a equiparse de urgencia para el agua. Especialmente los turistas no tenían previsto que después de un verano razonablemente bueno llegara este cambio radical. Ellos fueron mayoría a la hora de entrar en los comercios de la capital en busca de un paraguas, un chubasquero o unas botas de agua. «Hemos vendido en un sólo día hasta un 30% más de lo que suele ser un día habitual», confirmó ayer Jorge Saez, responsable de la clásica tienda Godofredo.
«La gente ha comprado muchos chubasqueros porque como ha llovido tanto y tan de repente, poca gente lo esperaba». Desde inicios de semana, salir a la calle es una cuestión de suerte:«Tan pronto está cayendo un chaparrón como a la media hora tienes que quitarte todo porque sale el sol y calienta, porque aún es septiembre y te asas. Luego, al instante, vuelves a tener que resguardarte y te quedas fría porque vuelve a caer otra tromba», contaba ayer María Luisa Gándara, una jubilada nacida en la capital cántabra que conoce bien el clima.
Ventas a extranjeros
La auténtica «locura» ha sido la venta a turistas. «Han llegado en masa varias excursiones y extranjeros y se han llevado casi todos los chubasqueros y paraguas que teníamos», cuenta Ana Mazo, responsable de la tienda Centro Hogar, antiguo Cadena Cien, ubicado en la calle Hernán Cortés. «Sólo en verano, en pleno agosto, en aquella semana que hizo tan malo, vendimos más. Hubo un día que hicimos 2.500 euros en paraguas, chubasqueros y gorros».
Es un impacto, el del turista que no había metido todo esto en la maleta, que notan también en los comercios que se encuentran en Calderón de la Barca, frente a la estación de Ferry, donde también estacionan los autocares con excursiones del Imserso. «Es gente que no lleva un chubasquero y que sabe que puede comprarlo aquí, y eso es lo que ha hecho», cuenta Cristina Bárcena, de Regate Sport. «Venía gente de Tenerife y se sorprendía con el tiempo que tenemos por aquí».
Otros tantos fueron al estanco Machichaco, que se encuentra a pocos metros y que vende de todo. «Hay mucha gente sorprendida por este otoño que ha entrado tan abruptamente», explica María Grande. «Hay mucha gente que viene también a bodas que se celebran en el hotel Bahía y que al final, si dan un paseo por la ciudad, lo primero que hacen es una parada aquí para comprar un paraguas». Los más despreocupados son los turistas ingleses que llegan en el Ferry. «A ellos parece darles más igual. Compran un gorro y luego pueden ir en chanclas y bañador. Será que están más acostumbrados a este tiempo y en el fondo pensarán que aquí hace bastante mejor que allí», justifica con ironía sobre un hecho que ha obligado también a equipar a los más pequeños.
De hecho, en la tienda Imagina Santander, en Lealtad, Pilar Ribalaygua ha colgado decenas de pequeños chubasqueros de todos los colores para cuerpecitos diminutos. «Vendemos mucho para los más pequeños, pero también para los mayores, y estos días están siendo buenos, pero sólo con los turistas. Los de aquí no compran nada», lamenta. Será que el autóctono está ya equipado. «La gente se queja mucho del turismo, pero no sé de qué piensa que vamos a vivir el día que no haya turismo, porque son muchos los negocios que beben de ello».
También hacen caja quienes venden calzado, como la zapatería Gaspar, también en Lealtad. «Botas, botas y más botas», confiesa Paula Gómez, la responsable. Ya no se compran katiuskas, sólo botas. «Eso sí, que tengan Gore-Tex o similar, ha sido la revolución y es lo que lleva todo el mundo». Parece que las lluvias cesarán a partir de hoy, pues Aemet anuncia mayor estabilidad atmosférica;aunque probablemente haya que volver a ponerse las botas de cara al fin de semana en que podrían regresar los chubascos.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión