El Gobierno presenta el plan de salud para «revolucionar» la sanidad en Cantabria

Pascual ha puesto de manifiesto las seis líneas estratégicas -salud en todas las políticas, de personas, compartida, cercana, de valor y de futuro- que se recogen en el plan y sustituyen al último instrumento estratégico elaborado hace diez años y que comprendió el periodo entre los años 2014 y 2019. Entre las principales metas que tiene por delante el informe se encuentra que el 90% de las citas de Atención Primaria sean atendidas en menos de 24 horas y lograr un incremento en el porcentaje de población que participa en los programas de cribado preventivo -en el cáncer de mama, alcanzar el 75% de la población diana; el 70% en el caso del cáncer de colon, y el 60% en el de cuello de útero-.

«Tres de los ejes se centran en la humanización del cuidado. Hablamos de salud de personas para una atención personalizada, más humana. De salud compartida, porque las personas y las comunidades toman parte activa en el cuidado de su salud», ha destacado el consejero. Asimismo, ha incluido el punto de salud cercana para «reforzar la atención primaria y acercar los cuidados allí donde más se necesitan». Pascual ha subrayado que «cuidar no es solo tratar, es acompañar, escuchar y comprender». El objetivo que persigue la Consejería es orientar todos los objetivos y virtudes a la salud de los ciudadanos. «Hay que olvidar la imagen estática de hospitales, centros de salud y consultorios. La salud se construye en cada hogar, cada barrio y en cada decisión política».

Uno de los puntos que aborda de lleno el documento es la transformación digital y su presencia en el cuidado, ya no como una opción sino como una realidad. y en el que ha tenido una relevancia especial el Plan de Salud Digital de Cantabria 2024-2027. A través de herramientas digitales, inteligencia artificial y nuevos modelos de atención, el sistema cántabro de salud persigue una modernización y la digitalización es vista como una palanca de cambio ineludible. «No estamos hablando de ciencia física, sino de la revolución digital que ya está aquí. La red será un laboratorio vivo de soluciones que mañana explotará», ha apuntado Pascual. El plan apuesta por la inteligencia artificial para orientar la toma de decisiones clínicas, la telemedicina y la teleasistencia para facilitar el acceso a servicios sanitarios avanzados sin necesidad de desplazamiento.

Pascual también ha enfatizado durante la presentación en el auditorio del Centro Botín la importancia de lograr un giro de la curación a la prevención. «Ahí es donde entra la responsabilidad de los ciudadanos, antes de que se conviertan en pacientes y pasen a engrosar listas de espera». Para ello el proyecto no aborda el tratamiento de enfermedades, sino también fomentar un modelo donde los ciudadanos se responsabilicen de su propia salud en entornos saludables. Iniciativas como la evolución de la aplicación 'Cantabria +150', orientada a la actividad física y la prevención, son ejemplos de este enfoque proactivo que busca mejorar el bienestar emocional y la recuperación de los pacientes.

«Este plan no será posible sin el compromiso de nuestros profesionales sanitarios», ha confesado Pascual. Vamos a medir con audacia, escuchar sin miedo e innovar sin protagonizar. Porque la salud ya no es un coste. Es el motor de una Cantabria más resiliente, más justa, más humana y más próspera».

Si algo se ha destacado de este plan es que su metodología ha sido de carácter participativo. Se ha involucrado a expertos, profesionales sanitarios, representantes del ámbito social, académico, empresarial, colegios profesionales y la ciudadanía en general. Este enfoque inclusivo asegura que sea un documento «vivo», capaz de adaptarse e incorporar aportaciones para reforzar su estrategia y consolidar un sistema de salud más cercano y adaptado a los desafíos actuales. Se busca la «salud en todas las políticas», concibiendo el plan como un marco que enlaza con otras iniciativas regionales.