Sanidad acepta la oferta que traerá a Valdecilla el primer centro público de protones de España
La consejera, Luisa Real, llega a un preacuerdo con la empresa privada que invertirá 40 millones de euros para instalar en el hospital la terapia más eficaz contra el cáncer
Cantabria entrará por la puerta grande en la era de los protones, la radioterapia más avanzada y precisa contra el cáncer, capaz de llegar ... a las células tumorales que se escapan al tratamiento convencional. Después de meses de negociación, la Consejería de Sanidad ha aceptado la oferta presentada por una empresa privada dispuesta a invertir más de 40 millones de euros para instalar en Valdecilla el primer centro de protonterapia de la sanidad pública en España. Un proyecto que desde el minuto uno contó con el apoyo rotundo del gerente del hospital, Julio Pascual, y del jefe de servicio de Oncología Radioterápica, Pedro Prada -del que dependerá la unidad-, conscientes de que estaban ante «una oportunidad que no se podía dejar escapar». Y así lo han defendido con ahínco mientras la consejera, María Luisa Real, demoraba la respuesta a la espera de encontrar el encaje de esta colaboración público-privada que, ahora que ha recibido luz verde, situará a la región en el mapa internacional como referente de la radioterapia más avanzada de Europa.
Hasta la fecha, sólo dos hospitales privados (Quirón y la Clínica Universitaria de Navarra) han dado los primeros pasos para incorporar los protones a su cartera de servicios en España, aunque Valdecilla será el primero de la red pública que ofrezca este tratamiento de máxima precisión -su gran ventaja es que permite aplicar dosis muy altas sin dañar los tejidos sanos- y que, por tanto, aumenta las tasas de curación. Un hito que lo convertirá de forma automática en centro de referencia nacional (CSUR), recibiendo así a los pacientes de todos los hospitales del país susceptibles de beneficiarse de los protones, un arma letal frente a los tumores más escondidos.
En la actualidad este tratamiento, que tiene un coste medio de 30.000 euros, sólo es accesible en centros de Europa, como Munich, Italia, Praga y Niza, o de Estados Unidos, lo que implica tiempo en los trámites de la derivación desde la sanidad pública, que la propia enfermedad no siempre da, y un coste económico para las familias desplazadas, que tienen que lidiar también con problemas logísticos, de idiomas o incluso laborales, como ocurre cuando los pacientes son niños que viajan al extranjero acompañados de sus padres en busca del milagro de los protones. Que ese milagro tenga ya un pie en Cantabria es, sin duda, la mejor noticia con la que Real, que afronta un convulso fin de legislatura, marcado por los conflictos laborales, podría poner el broche a su gestión al frente de la sanidad cántabra.
«La unidad de protones estará atendida y dirigida por profesionales del hospital», destaca Real
En una primera valoración tras la reunión con representantes del grupo inversor, la consejera destacó que «los pacientes de Cantabria que lo precisen tendrán este tipo de tratamiento asegurado», sin necesidad de desplazarse fuera y sin coste para su bolsillo. Recordó que «a lo largo de esta legislatura se ha realizado una continua e importante apuesta por la innovación y el desarrollo tecnológico en todos los hospitales, y fundamentalmente en Valdecilla, para hacer de este hospital un centro innovador y de referencia para el mayor número de procesos y patologías».
El equipamiento de protonterapia se ubicará en el corazón del hospital, junto a las dependencias del área de Oncología Radioterápica, y «estará atendido y dirigido por profesionales del propio hospital», que era una de las condiciones que había marcado la consejera desde el inicio de las conversaciones. Entre técnicos, físicos y médicos, la unidad precisará alrededor de 28 profesionales.
El dato
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450 es la cifra aproximada de pacientes que recibiría al año el centro de protonterapia de Valdecilla.
Asimismo, Real subrayó que la incorporación de la protonterapia, además de los beneficios asistenciales, «posibilita una nueva línea en el campo de la formación y la simulación clínica, dentro del Hospital Virtual, y de la investigación, a través del Idival». Este proyecto de colaboración público-privada permitirá incorporar al sistema una tecnología a la que sería casi imposible llegar sin el apoyo empresarial.
El grupo inversor, que ha pedido discreción hasta que el proyecto esté consolidado, siempre tuvo clara su apuesta por Valdecilla, porque «reúne los requisitos de excelencia y especialización que precisa esta tecnología de alta complejidad; apuesta por la innovación y cuenta con un servicio de Oncología Radioterápica puntero». Fueron algunos de los factores que hicieron que Valdecilla resultara el elegido para acoger el primer centro de protones de carácter público.
«A partir de ahora, establecido el marco general, se inician los trámites administrativos para culminar este importante proyecto», concluyó la consejera. No obstante, hasta que los protones lleguen a los primeros pacientes aún pasarán dos años desde que se firme el acuerdo final, porque antes ha de construirse el búnker acorde a las necesidades de seguridad que requiere la unidad.
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