Fran Calzón: «Fue muy especial jugar en mi casa, ante mi gente y frente a mi hermano»

«No jugaba en Utrera desde que tengo 16 años. Y ahora tengo 29... Así que son 13 años. En ese pabellón, Vistalegre, no había jugado. Es nuevo», señala el capitán del Textil Santanderina. Fran tenía «dudas» acerca de cómo le recibirían sus paisanos. Pero las dudas duraron muy poco. «Fue todo muy bien. La gente fue súper cariñosa conmigo. Personas que no conocía vinieron a saludarme». El reconocimiento a uno de los utreranos que más lejos ha llegado en esto del voleibol.

Pero si jugar de nuevo en su ciudad fuese poco aliciente, había otro que convertía al partido en lo más emotivo del mundo para Fran. En el Club Voleibol Utrera, con el número 7, Alejandro Calzón Algaba. Para Fran, siempre Álex. Su hermano pequeño. «Yo soy del 92, y él del 97», añade el utrerano del Textil. Era la primera vez que se medían en una competición oficial uno frente al otro. Y si para el capitán del Textil fue algo especial, resulta difícil imaginar lo que sintió Álex. «Para mí fue bonito. Fue muy especial jugar en mi casa, ante mi gente y frente a mi hermano. Pero para él... Soy el hermano mayor y me tiene como a un ídolo». Para rematar la idea de 'partido en familia', en las filas del Utrera jugaron los hermanos Coronilla Maya -Alejandro, Jorge y Luis Manuel-. «En un momento llegó a haber en la pista cinco hermanos», comenta entre risas Fran Calzón. «Y además, esos tres hermanos del Utrera son de mis mejores amigos».

Las obligaciones laborales de Álex le impidieron entrenar con el Utrera durante toda la semana pasada. Así que «no pudo jugar mucho en el partido», comenta su hermano mayor. «Pero sí coincidimos en la pista. Poco, pero coincidimos». Lo justo para que el hermano menor clavase un remate ante Fran. «Me puntuó», afirma entre risas el capitán del Textil. En la grada, durante el partido, había un grupo de gente dividida. Y animando por igual a los dos equipos. «En total vinieron unas 20 personas de la familia». Al frente, Francisco y Asunción, los padres del '7 del Utrera y el '13' del Textil. Por primera vez en un partido de voley en Utrera, aplaudían a los dos equipos. Fran estaba tan a gusto «que ni me di cuenta de que se acabó el partido».

Pero la emoción y los sentimientos de la familia Calzón no interfirieron en un partido de voley en el que el Textil Santanderina hizo valer su condición de uno de los ogros de esta Superliga Masculina 2. «Somos uno de los recién descendidos de la Superliga, y eso se nota», apunta Fran. «El Utrera juega con gente de casa, y nosotros tenemos fichajes, gente experta...». Este sábado visita el Matilde de la Torre el Sanaya La Laguna. Segundo en la clasificación y también invicto. «Yo creo que es el partido que nos va a medir, que nos dirá dónde estamos». Aún así, el camino de retorno a la Superliga será largo. «Hay que quedar entre los dos primeros. Y luego, te lo juegas todo en tres o cuatro días. Con los otros dos primeros de los otros dos grupos, se juega un playoff. Y los dos que se clasifiquen para la final, serán los que asciendan a la Superliga».

Aunque para ese objetivo aún queda mucho. En la agenda de la familia Calzón ya hay una fecha marcada en rojo. 29 de enero de 2022. En el Matilde de la Torre, Textil Santanderina frente al Utrera. «Será también especial, porque Cabezón también es mi casa», concluye Fran. «Me imagino que venga gente de Utrera para seguir el partido. Somos una familia muy unida».