Economía circular: una herramienta ambiental y una oportunidad económica
El proyecto Sostenibles celebró su tercer foro temático, centrado en la necesaria evolución del modelo productivo hacia un sistema que fomente el consumo responsable y entienda los residuos como recursos valiosos
Bajo el título 'Economía circular: clave para un futuro sostenible', el salón de actos de El Diario Montañés acogió el tercer foro temático enmarcado en su proyecto Sostenibles. Un espacio de diálogo que dejó una certeza compartida: la economía circular ya no es un concepto aspiracional ni una meta a la que llegar, es una herramienta real para luchar contra los retos que tenemos y una oportunidad económica que ya está demostrando sus virtudes. Pero necesita recursos que la sostengan y la afiancen: concienciación, colaboración público privada, planificación estratégica, agilidad administrativa...
Y Cantabria está en ello, lista para afrontar la transición y bien posicionada para conseguirlo. Así lo constató el consejero de Fomento, Vivienda, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria, Roberto Media, quien dio la bienvenida institucional al encuentro exponiendo brevemente la hoja de ruta que está llamada a impulsar ese proceso de cambio en Cantabria: la Estrategia de Bioeconomía y Economía Circular.
Tras el consejero, subió al atril Ana Lorena Esteban, codirectora de la Cátedra MARE de Economía Circular, para impartir una ponencia marco sobre las principales razones por las que, actualmente, es importante dirigir los pasos de las instituciones, las empresas y la sociedad hacia este modelo productivo que «nos obliga a repensarlo todo».
Roberto Media: «Cantabria está preparada y tiene muy clara la hoja de ruta»

«Este es un asunto del que nos va a tocar hablar mucho en el futuro y, afortunadamente, podemos presumir de que Cantabria está preparada y tiene muy clara la hoja de ruta». Así lo aseguró el consejero de Fomento, Vivienda, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente en alusión a la Estrategia de Bioeconomía y Economía Circular que su departamento ha presentado recientemente.
Roberto Media aprovechó la ocasión para hacer hincapié en la necesidad de este documento, que llega «para adaptarnos rápido a los cambios que está viviendo el mundo y con el objetivo de que Cantabria no se quede atrás». Para ello, ha establecido un «ambicioso programa» que demuestra su «firme apuesta» por la economía circular en lo que es algo más que un «ejercicio de responsabilidad política, es también una oportunidad estratégica para la mayoría de los sectores productivos de la región», sentenció el consejero.
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«No es una opción estratégica, es una necesidad estructural»

Dejar atrás la lógica del modelo productivo lineal, basado en extraer, producir, consumir y desechar para afianzar un sistema que «priorice el uso eficiente de los recursos y la minimización de los residuos», no es sólo una cuestión urgente para nuestra sociedad, sino una responsabilidad ineludible. Y es que, hoy en día, «la economía circular no es una opción estratégica, sino una necesidad estructural».
Con este mensaje arrancó su intervención Ana Lorena Esteban, codirectora de la cátedra MARE de Economía Circular y encargada de impartir la ponencia titulada 'Economía circular: ¿por qué importa?'.
La profesora de Tecnologías del Medio Ambiente de la Universidad de Cantabria estructuró su intervención en siete razones clave que justifican esta transformación, apoyando cada una de ellas en datos, desafíos y oportunidades lo suficientemente contundentes como para darnos cuenta, desde todas las esferas –institucional, empresarial y social–, de que ya no es posible seguir mirando para otro lado.
Los límites físicos del planeta fueron el primer punto de la lista. «Son reales y los estamos sobrepasando; por ello, no hay sostenibilidad posible si no gestionamos bien lo que es finito», argumentó Esteban.
En segundo lugar destacó el vínculo directo entre economía circular y lucha contra el cambio climático, recalcando que se trata de una «herramienta clave para reducir las emisiones», y que «si no transformamos el modelo de producción y consumo, no alcanzaremos los objetivos climáticos».
Otra cuestión central, citó, es el plástico, «símbolo del modelo lineal», cuyo uso y tratamiento necesitan de medidas circulares para reducir su impacto ambiental. Pero no se trata únicamente de reciclar, afirmó también la codirectora de la cátedra MARE, «porque hoy sabemos que con esto no basta». Hay que ampliar el enfoque con estrategias que incluyan rediseñar, reducir, reutilizar, reparar, renovar y recuperar, antes de reciclar. Para ello, reclamó, hace falta «visión estratégica, innovación y colaboración».
En quinto lugar, Esteban advirtió de que este modelo es una clara necesidad económica, porque «reduce la dependencia de materias primas, mejora la eficiencia operativa y abre nuevas oportunidades». Así, hay que descartar esa idea obsoleta de que es un coste añadido, al contrario, «es una inversión inteligente». En sintonía con ello y dirigiéndose directamente a las empresas, la académica señaló el coste que tiene para las organizaciones no actuar. «No adaptarse no es mantenerse igual: es quedarse atrás», porque en un entorno más exigente, la economía circular es «una herramienta de resiliencia».
Finalmente, la ponente aludió a la dimensión social y ética del nuevo modelo, «nos obliga a pensar en la responsabilidad intergeneracional, en cómo garantizamos que las generaciones futuras tengan acceso a los recursos y condiciones de vida que hoy disfrutamos».
El entorno académico, un socio útil para las empresas
La Cátedra MARE de Economía Circular es una iniciativa conjunta de la Universidad de Cantabria y la empresa pública MARE que tiene como misión «formar, investigar, transferir conocimiento y generar impacto social» en esta materia.
De cara a las empresas, explicó Esteban, «la universidad puede ser un socio muy útil ofreciendo asesoramiento, colaboraciones en I+D+i, formación continua y vínculos con redes de financiación». Porque, concluyó, «avanzar hacia una economía circular no es sólo una cuestión técnica, es también una cuestión de alianzas».
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