La Policía encuentra dentro de la barra de un bar de Santander hachís, éxtasis, cocaína y marihuana
Un cliente y el dueño del establecimiento acaban detenidos por sendos delitos contra la salud pública | La hija del hostelero también es denunciada por permitir consumir sustancias estupefacientes en el local y otra serie de irregularidades
La Policía Local de Santander ha detenido a dos hombres por un delito contra la salud pública, uno es el cliente de un bar al que encontraron diversas sustancias en su coche y el otro, el propietario del mismo local, donde los agentes hallaron hachís, marihuana, cocaína y éxtasis. La hija del hostelero también acabó denunciada por toda una serie de irregularidades, entre otras, por tolerar el consumo de drogas dentro del local.
El epicentro del presunto 'negocio' estaba en un bar situado en las inmediaciones de la calle Augusto González Linares. Fue en esta zona donde ayer miércoles, sobre las 20.20 de la tarde, los agentes se dirigieron hacia un coche que estaba aparcado encima de un paso de peatones cuando salió un hombre «de forma atropellada» de un bar situado justo enfrente para hacerse cargo del vehículo. Cuando los policías le pidieron la documentación para proceder a ponerle la multa notaron que el individuo olía «intensamente a hachís» y que además estaba «muy nervioso» y respondía «de forma atropellada» a las preguntas que le hacían. Así que procedieron a cachearlo y a registrar el vehículo, donde encontraron cinco piezas de hachís (con un peso total de unos 420 gramos). Este individuo, con las iniciales C.F., de 34 años de edad, acabó detenido por un supuesto delito contra la salud pública.
La intervención continuó, porque el arrestado dijo que se había dejado la cazadora en el bar. Entonces, los agentes entraron para cogerla y pidieron al dueño del local que les mostrara dónde estaba la prenda. Y vieron al instante que el hostelero tenía «una actitud muy nerviosa», así que se pusieron a registrar el local y dentro de la barra, en un cajón, encontraron el alijo: 65 pastillas de éxtasis, un trozo de hachís, un envoltorio de cocaína y una bolsa con cuatro cogollos de marihuana. También se incautaron de una pequeña balanza digital, un cúter con restos de «sustancia blanca» y un cuchillo de 7 centímetros hoja. Por todo esto, el hostelero, con las iniciales E. R. y de 46 años de edad, también fue detenido por un supuesto delito contra la salud pública.
No quedó aquí la intervención policial de ayer por la tarde, ya que la titular del bar es la hija del dueño, una joven de 20 años de edad con las iniciales R. V., que fue denunciada por un compendio de irregularidades en relación a la licencia del local. Por ejemplo, reproducir música sin tener permiso para elllo, permitir el consumo en la vía pública y por la instalación de elementos de una terraza sin presentar la autorización correspondiente. También fue denunciada en base a la Ley 4/2015, «por tolerar el consumo de sustancias estupefacientes» en el interior del local y por la «tenencia de objetos fuera de los lugares habilitados para su uso», en referencia a los dos palos de caña con punta metálica y un palo de madera con empuñadura que los policías vieron en el bar.
A su vez, a un cliente del establecimiento, con las iniciales V.D., se le incautó un trozo de hachís.
