El Ayuntamiento de Torrelavega eleva al Supremo la expropiación a Sniace del Óscar Freire

El Ayuntamiento no está de acuerdo con la valoración de la Sala de lo Contencioso Administrativo efectuada hace un mes y medio. Según esgrime el recurso, el TSJC hizo una interpretación «indebida» de la Ley del Suelo, la que rige este tipo de tasaciones, aplicando para la superficie unos coeficientes que no sólo no se ajustan sino que, de hecho, se presentan en el fallo «sin una motivación suficiente». De ahí, y siempre según los servicios jurídicos municipales, la sentencia terminó haciendo una valoración «errónea» y «arbitraria» de la prueba pericial judicial. Es más, el Ayuntamiento argumenta que, al contrario de lo que estimó la Sala en aquel dictamen, el Jurado de Expropiación Forzosa no fijó el valor de las fincas como si fueran de carácter rústico sino bajo el único criterio que podía utilizar: «La referencia al suelo rústico para calcular el valor del uso deportivo, ya que no existe en el mercado un valor similar».

En cualquier caso, la diferencia de criterio se hizo efectiva en aquella sentencia cuando los jueces corrigieron lo expuesto en el informe del Juzgado de Expropiación y cambiaron por completo el rumbo del desencuentro. Tras admitir parcialmente el recurso de Sniace, los 51.022 metros cuadrados que integran el Óscar Freire pasaron a recibir una calificación de suelo urbanizado, encareciendo su precio hasta 2,7 millones de euros que, dicho sea de paso, también están lejos de los casi 3,4 millones que la firma exigía por ellos.

El precio del complejo deportivo es la última de las dos patas que mantienen esta discusión en pie desde hace años. La cadena de juicios y recursos alrededor del otro 'pedazo' de Sniace en liza, el parque de Las Tablas, ya terminó hace medio mes con un resultado óptimo para los intereses del Ayuntamiento. Aquí no había 2,7 sino 10 millones de euros en juego, la mayor reclamación que ha encarado la ciudad. Y por fortuna para las arcas públicas, el municipio se libró de pagarlos bajo sentencia firme de, precisamente, el Tribunal Supremo. Tras aquel fallo, quedó claro que El Patatal costará 322.302 euros -218.822 el suelo, 88.132 el arbolado y 15.347 en base al premio de afección-.

Está por ver si el Ayuntamiento de Torrelavega se libra o se traga definitivamente estos 2,7 millones por los terrenos del Óscar Freire. Sea como sea, el Consistorio arroja un balance positivo de los juicios, sobre todo atendiendo a la cantidad de dinero que Sniace venía solicitando por sus activos. «En todo el proceso ha habido buenas y malas noticias para el Ayuntamiento, pero el resultado conjunto es muy bueno», declaraba aquel 1 de noviembre el alcalde, Javier López Estrada, antes de recordar los 13,9 millones que -Óscar Freire incluido- exigía la química cuando la expropiación empezó. En estos momentos, celebra, «la cuantía fijada por la Justicia es de 3,2 millones».