Tazas humeantes de cine y vida

El café tene su propio lenguaje y ceremonia. Como el ritual de fumar, ahora tan mal visto, incluso demonizado. Desde las pantallas (las de la sala oscura, que son las únicas que deberían existir para eso que llamamos cine) miles y miles de películas han destilado tazas humeantes, cigarrillos como una contraseña entre conversaciones, amantes y aventuras. Pocas veces se han fundido ambos con tanta presencia como en este filme coral y fragmentado, de historias diferentes (once) pero con un halo común, caso de 'Coffee and Cigarettes'. Tienen algo que ver cuestiones como las teorías sobre la conspiración contra Elvis Presley, el humor de Abbot & Costello, la preparación del té inglés, una ficticia banda de rock, o París en los años veinte...pues que todas asoman en torno a una mesa, con diversos personajes que toman café. En los noventa un cortometraje de Jim Jarmusch triunfó en Cannes. Pero una década larga después el cineasta de 'Paterson' rueda un conjunto de episodios cortos que conforman este filme plural, en blanco y negro, que lo mismo incluye a un joven Roberto Benigni , que a la hoy estrella Cate Blanchett interpretando a dos personajes completamente diferentes; o un impagable y auténtico encuentro entre Tom Waits e Iggy Pop. Ironía, humor negro, ritual y contraste, en un cruce donde el café se convierte en factor humano.

Coffee and Cigarettes

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Director: Jim Jarmusch.

Año: 2003

Duración:96 minutos.

País: EE UU.

Intérpretes: Roberto Benigni, Steve Buscemi, Cate Blanchett, Bill Murray, Alfred Molina, Iggy Pop, Tom Waits....

La fama, la amistad, los finales inesperados, la complicidad, la familia son cuestiones que asoman y se entrelazan con el café que sirve también de territorio narrativo. Diálogos como letanías existenciales. Periferia, más que marginación. Poemas en prosa o prosa poética de personajes. Lugares y no lugares. Pausas y silencios. Trivialidad y trascendencia. Y la cafeína inoculada entre las criaturas. Minimalismo, sutil puesta en escena y confrontaciones armónicas o epatantes para una mesa de café donde la vida se toma a sorbos o como el humo se va.