Los botellones regresan a la playa de El Puntal y desquician a los vecinos de San Mamés de Meruelo

En Torrelavega, donde la actuación de la Policía montada dejó imágenes muy comentadas en internet, se multó a cinco personas y se detuvo a otra que mostró actitudes violentas cuando los agentes lo identificaron para comunicarle su sanción. Y en Camargo los agentes doblaron las denuncias. Pusieron tres multas por incumplir el toque de queda a tres personas que además fueron sancionadas porque estaban bebiendo en la calle; porque el botellón volvió a estar muy presente este fin de semana en la región.

En Santander se formularon 29 denuncias por este motivo, según indicó este lunes la Policía Local en el parte del fin de semana. Repitieron algunos enclaves clásicos donde los jóvenes se reúnen para este tipo de festejos: los bajos del restaurante Maremondo, los jardines de San Roque y la plaza de Italia, en El Sardinero. También el entorno del parque Mataleñas; la zona de Las Llamas y Cañadío, entre otras.

Además, los agentes tuvieron que personarse en seis viviendas donde los vecinos alertaron de los fuertes ruidos. Allí se formularon las consecuentes denuncias por perturbar el descanso de los residentes.

La fiesta regada de alcohol sin prestar atención a las precauciones por el covid se reeditó también en El Puntal. Cientos de personas se reunieron sin cumplir con las restricciones en un nuevo episodio de este tipo de actos sin que la Guardia Civil ni la Policía Local de Ribamontán al Mar actuaran. Allí, lógicamente, no hubo denuncias porque no hubo agentes.

Los botellones estuvieron de nuevo activos también en Torrelavega. «Hemos tenido tres concentraciones que se han disuelto sin incidentes», reseñó el responsable de Seguridad Ciudadana en el Ayuntamiento, Pedro Pérez Noriega. Obligó a los agentes a actuar en Tanos, en El Valle y en la céntrica calle General Ceballos. Lo más llamativo el fin de semana fue la intervención de la Policía montada. «Este próximo fin de semana también estarán presentes y esperamos que su actuación sirva para que la gente comprenda que hay que cumplir con el toque de queda. Porque todo lo que sucedió este sábado fue pasada la una y diez de la madrugada, cuando se supone que todo el mundo debería estar ya en su casa», aclaró Pérez Noriega.

Los caballos acudieron a Torrelavega para velar por la seguridad en el concierto de Juan Magán y una vez finalizado el evento continuaron con la vigilancia del resto de la ciudad. Es entonces cuando se dieron estos momentos de tensión que terminaron con la detención de una persona.

Lo que faltó en San Mamés de Meruelo este pasado fin de semana fueron agentes porque es un ayuntamiento que carece de Policía Local. Los vecinos fueron testigos de la reunión de varios jóvenes (menos de una docena) en el parque rural Las Quintas. «Estaban tranquilos pero comenzaron la fiesta por la tarde y la alargaron durante parte de la noche sin hacer caso del toque de queda», informa uno de los testigos.