Los docentes de segunda lengua extranjera temen la pérdida de 100 puestos de trabajo con la Lomloe

Cantabria, que recientemente ha sacado su decreto autonómico de ESO y Bachillerato a información pública, no contempla esa materia como troncal. Eso escama al sindicato y a los docentes. «Elegir solo el inglés supone un empobrecimiento cultural y económico», lamentaron Conchi Sánchez, responsable de la Federación de Enseñanza de CC OO, y Marion Perrard y Marie Berard, ambas representantes de la Asociación de Profesores de Segundas Lenguas Extranjeras. «Estamos a la cola de Europa» y «cerrando la puerta» al mercado laboral internacional a «nuestros jóvenes, que no podrán competir contra gente que habla cinco o seis idiomas», aseguraron, no sin antes recordar que buena parte de la economía cántabra se basa en el turismo.

Si la materia es declarada optativa tendrá que competir con otras asignaturas. Por tanto, a los docentes de segunda lengua extranjera les preocupa que no se puedan formar grupos con un número de alumnos suficiente. Eso creará «desigualdad» y, además, conllevará la pérdida de hasta un centenar de puestos de trabajo en este colectivo de profesores.

CC OO va a pedir una reunión con Marina Lombó. Si la consejera de Educación y FP no da una respuesta satisfactoria, el sindicato trasladará sus exigencias a los portavoces educativos de los grupos parlamentarios y al Comité de Directores de Secundaria, y también se plantea presentar enmiendas al decreto cuando pase por el Consejo Escolar, como ha hecho con los borradores de Infantil y Primaria.