«Ha sido un trabajo gratificante»
El Gobierno destaca la labor de los voluntarios jubilados que atendieron el 900 612 112, el número del coronavirus, durante el estado de alarma
La respuesta fue inmediata: «¡Sí!». Una afirmación rotunda. El 13 de marzo, el Servicio Cántabro de Salud (SCS) llamaba con urgencia a 19 profesionales ... jubilados para tomar posiciones en el 900 612 112, el número de información, atención y asesoramiento sobre el coronavirus. Veinticuatro horas después los 19 estaban trabajando. «Ha sido muy gratificante. Más que un trabajo ha sido un regalo. Volvería a participar sin pensármelo dos veces», responde un emocionado Jesús Casanueva, uno de los voluntarios homenajeados ayer por el Gobierno de Cantabria.
Casanueva, médico jubilado, abandonó su reciente retiro porque sentía «una obligación como ciudadano en una situación dramática que nos sobrepasaba a todos». Además, confiesa que «lo mejor ha sido volver a estar activo, estar cerca de los más vulnerables y ayudar a los profesionales sanitarios cuando no daban abasto». «Lo que más me sobrecogía -añade- eran las llamadas de personas de mayor edad, que, además de la soledad habitual, sufrieron la soledad derivada del confinamiento. Eran los más indefensos». El servicio se creó desde cero en pocas horas. «Ha sido un crecimiento tremendo», explicó Verónica 'Roni' García, la coordinadora del grupo. «Hemos creado, desarrollado y engranado lo que es ahora, pero lo más enriquecedor ha sido la experiencia personal: aprender de toda su sabiduría», afirmó mientras apuntaba a los voluntarios jubilados. «Ha sido impresionante ver trabajar a los jóvenes médicos residentes con ellos y ver cómo han interactuado», añadió 'Roni' García.
Elena Basabe, médico voluntaria, asegura que «ha sido muy emotivo porque había gente aterrorizada al otro lado de la llamada. Para algunas personas era muy, muy duro». Para ella, ha sido «un trabajo diferente a la consulta porque no ves a la persona». Los pacientes, por lo general, «se quedaban tranquilos después de hablar y perdían parte del miedo». También, señala que «está muy contenta» y que le hace «ilusión que hayan contado con los jubilados para ser útiles».
Aquel 14 de marzo estaba a punto de decretarse el estado de alarma. Entonces, empezaron a trabajar los 65 sanitarios del '900', como llaman ellos al número. Dos meses después, el 18 de mayo, fueron sustituidos por profesionales de enfermería del SCS. Así liberaron a los 19 voluntarios jubilados, los 30 médicos internos residentes y 16 trabajadores del SCS que formaban este especial grupo de trabajo.
El '900' compartió la sala del Servicio de Emergencias del Gobierno de Cantabria con el 112, quién les dio una formación expresa para atender las necesidades de las personas que estaban al otro lado del teléfono. «Aunque hayan salido de casa para ir al centro de llamadas, no han dudado en exponerse, ayudar y colaborar», comentó Verónica García. A ella, todo ese trabajo le ha dejado «un sabor muy dulce». Y mira al futuro: «Como educadora de la Escuela de Pacientes del SCS quiero contar con ellos como colaboradores para que nos ofrezcan su experiencia, su sabiduría y su preparación», concluyó.
Reconocimiento público
El vicepresidente del Gobierno, Pablo Zuloaga; el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez; la gerente del SCS, Celia Gómez; y el subdirector de Cuidados del SCS, Pedro Herrera, agradecieron ayer la labor altruista de los voluntarios en un acto celebrado en la Consejería. Zuloaga afirmó que «por nuestra parte queda trabajar para estar lo mejor preparados para lo que pueda llegar». Y dio las gracias a los voluntarios: «Habéis sacrificado vuestro tiempo para atender a la ciudadanía de Cantabria, fuisteis el equipo de ataque contra el covid-19».
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