
Simpatía por el diablo
Cinesa, Yelmo y Ocine. ·
El blues y el terror se abrazan en una invocación de géneros. Hay folclore, memoria cinéfila y atrevimiento visual y narrativo en un filme vizarroSecciones
Servicios
Destacamos
Cinesa, Yelmo y Ocine. ·
El blues y el terror se abrazan en una invocación de géneros. Hay folclore, memoria cinéfila y atrevimiento visual y narrativo en un filme vizarroLa cosa es como si a 'El color púrpura' le hubiese salido un sarpullido mezcla de terror, blues, conciencia racial, serpientes, sexo y alcohol, todo ... ello enredado en un arrebato de vampirismo. Pero, sobre todo, bajo la pátina de coreografía 'blaxploitation (movimiento de los setenta de cine independiente creado por y para negros frente al Hollywood blanco dominante), el ortodoxo y a la vez libertario relato fantástico, lo que asoma es una excelente película de Ryan Coogler, que juega con las extrañezas que deparan la lucha entre el bien y el mal, discurre por las entrañas de eso que se llama pecado y se mueve como una melodía visual que reflejara la simpatía por el diablo.
Año 2025
País EE UU.
Dirección y guion Ryan Coogler
Reparto Michael B. Jordan, Hailee Steinfeld, Wunmi Mosaku, Jayme Lawson, Omar Benson Miller, Delroy Lindo, Jack O'Connell
Género Terror
Detrás de esta sopa de imágenes con mucha intensidad y su propio ritmo está Ryan Coogler, el responsable de la saga cinematográfica de Pantera Negra, 'Creed', a modo de spin-off de 'Rocky' y 'Fruitvale Station'. Un director fiel a una manera de contar el mundo que se ha mostrado fiel a un actor fetiche, Michael B. Jordan, como sucede también en 'Los pecadores'. En el pasado cabe recordar a 'Un vampiro suelto en Brooklyn, a Wes Craven en la dirección, y Eddie Murphy y Angela Bassett como protagonistas. Y con el paso del tiempo inevitable cabe citar al Wesley Snipes de 'Blade'.
El toque mágico, el legado cultural y la música de raíz se aúnan en este relato pulp sureño que combina vampiros, brujas y homenajes a Walter Hill, dentro de un drama gótico afroamericano. El folclore, la memoria cinéfila y el atrevimiento visual y narrativo constituyen los pilares de este filme bizarro, vistoso, pero también desmesurado. Por si fuera poco contiene en su concepción un particular pacto con el diablo: Ryan Coogler planteó una gran condición para el estudio que adquiriese la película para su producción: que los derechos de autor de esta volviesen a las manos del cineasta 25 años después de su estreno. Lo inusual e insólito de este acuerdo augura nuevos caminos en la industria. 'Los pecadores' reclama dejarse llevar, ser envuelto por ese cruce de caminos de su trama donde confluyen y colisionan demonios, gángsteres, hechizos, el gore y el Ku Klux Klan . Con Michael B. Jordan, en modo doble y gemelo, el blues se convierte en un mantra a través de un filme a la intemperie, osado, que juega con los géneros sin rubor hasta el paroxismo de una fusión entre la energía musical y el espasmo del fantástico.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Favoritos de los suscriptores
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.