«Si vienes al Racing sabes a qué vienes»

Con su llegada, Guille Romo pretende dotarle al centro del campo de esa creatividad que los últimos años no ha tenido el Racing. En el acto de ayer le acompañó Víctor Diego, responsable de relaciones institucionales del Racing, que fue el encargado de argumentar las virtudes del manchego con una frase altamente significativa. «Todo pasa por sus pies».

Con nueve temporadas en Segunda B, 77 partidos en Segunda División y siete en Primera, a sus 29 años Sergio Marcos llega al Racing después de haber logrado el ascenso con el Valladolid a la élite, de pertenecer en sus inicios en las estructuras de equipos como el Atlético de Madrid, Villarreal -además del club pucelano- y concluir una etapa en al Cultural Leonesa tras tres años consecutivos. El centrocampista llega ilusionado y con las ideas claras. «El que viene al Racing sabe a qué viene», explicó. A estas alturas y después de los malentendidos del año pasado, a Sergio Marcos le cayó la pregunta de cada verano. '¿Le han dicho que el objetivo es el ascenso?' «Sí, por supuesto. El objetivo y el proyecto que se ha hecho es para ascender». Alto y claro.

Guille Romo se ha encargado de construir -en ello está aún- un equipo con jugadores que hayan tenido experiencias muy similares a las que se avecinan esta temporada. Sergio Marcos es un ejemplo. En León es probable que la exigencia y la presión por lograr el objetivo tuviera un calibre, pero el manchego sabe que no tiene nada que ver con el que se encontrará en Santander. «Creo que la presión va con el jugador, es un tema con el que hay que vivir. Si vienes a un club histórico como el Racing sabes que la vas a tener y que necesitas convivir con ella». El nuevo fichaje racinguista fue más allá en esa obligación de asimilar esa situación de máxima exigencia. «Los objetivos están claros y sabemos que cuando las cosas van bien pues todo va bien, pero que cuando van mal hay que saber manejarla».

Los que le conocen -como aseguró Diego con sus palabras- siempre se refieren a él como un jugador de toque, imaginativo, de pausa y por encima de todo «de calidad». Ayer, en la sesión de entrenamiento previa al acto en La Albericia se pudo ver a Guille Romo ensayar algún dibujo táctico. Sergio Marcos ocupó el puesto de pivote, pero fundamentalmente el de mediapunta. El manchego no se cierra puertas. «He jugado en muchas posiciones; de delantero, pivote, de media punta... Ahora se trata de que el míster nos diga la idea que tiene y de ir poco a poco adaptándose», señaló el futbolista.

A estas alturas y a cinco semanas de que se levante el telón en la Primera RFEF todo son esperanzas, pero también dudas. Es la primera temporada y el formato y la estructura ha cambiado radicalmente. Nueve cursos en la Segunda B le sirven de aval a Sergio Marcos para opinar sobre qué le parece el cambio y qué espera de él. «A mí me parece que puede ser ilusionante. Lo que sabemos es que todos los equipos van a salir a competir por unos objetivos muy similares y que cada partido será complicado. Espero que sea un paso adelante», indicó el racinguista. Su propia experiencia en vestuarios de calidad y con exigencias también le sirve para sentirse optimista de cara al rendimiento que puede ser capaz de dar la plantilla del Racing, que aún no está cerrada del todo. «Creo que tenemos muy buenos jugadores, es una pasada poder entrenar todos los días con ellos y necesitamos conocernos e ir poco a poco haciéndonos fuertes para lograr lo que queremos».

No estuvo muy requerido Víctor Diego en esta ocasión. Compareció dos días antes en la presentación de Fausto Tienza y ayer no tenía mucho más que decir. Volvió a salir por la tangente -como es lógico a estas alturas de pretemporada- sobre qué puede pasar con algunos canteranos cuya continuidad está un tanto en el aire. Concretamente fue el futuro de Martín Solar el que salió a la palestra. «En las pretemporadas siempre pasa esto. Los jugadores tienen ofertas, los representantes hablan, pero ahora mismo no hay nada que decir. No hay nada que contar. También se está viendo en la cantera donde hay futbolistas que renuevan, otros que regresan. Ahora mismo no hay nada que decir», concluyó.

No sólo es incierto el futuro de un Martín Solar, que ahora mismo está confinado a la espera de cumplir con la cuarentena después de dar positivo por covid. También existen dudas sobre el de Mario Musy, que regresa al equipo tras su cesión en el Portugalete, o el de Alberto Villapalos, que con contrato en vigor y con los fichajes que han llegado al equipo parece tener difícil hacerse con un sitio. Tampoco está claro que todos los que han empezado la pretemporada acaben en el primer equipo. Ni mucho menos, Algunos, los chicos del filial, porque retornarán al Rayo Cantabria, y otros porque tratarán de salir cedidos en busca de los minutos que en el Racing no encontrarán. Será labor de Guille Romo, en colaboración con Ezequiel Loza, el hilar fino y no dejar escapar talento sin ponerle freno a su progresión. La pretemporada irá resolviendo las dudas.

Por el momento no ha habido ninguna petición de salida por parte de los jugadores. Todos quieren apurar sus opciones y ganarse la confianza. Cinco semanas tienen por delante.