La cántabra West Packaging compra una fábrica en Sevilla para duplicar su producción de cartoncillo

La motivación que ha llevado a West Packaging a adquirir una nueva instalación en Sevilla por encima de otras ubicaciones obedece a que «no hay ninguna fábrica de nuestro sector en Andalucía», argumenta el director general de la compañía, Fernando Carral. Es por ello que define la compra como una «operación estratégica» para poder reforzar su presencia tanto en el mercado nacional como internacional y avanzar en el desarrollo de soluciones propias e innovadoras, como las anillas biodegradables que ya produce, y los vasos sin lámina de plástico 100% compostables (los primeros realizados en el país).

La planta que incorpora West Packaging se localiza, concretamente, en el polígono industrial de La Isla, en el término de Dos Hermanas. Se trata de una nave de 15.000 metros cuadrados que hasta la fecha se utilizaba como rotativa, por lo que deberá ser dotada de nueva maquinaria al completo para el nuevo desempeño. El espacio estará equipado con dos líneas de impresión, cuatro troqueladoras, tres plegadoras y maquinaria auxiliar de última generación, lo que la convertirá «en una de las primeras fábricas especializadas en packaging sostenible de su tipo en toda Andalucía».

La instalación de la maquinaria en la nueva planta se llevará a cabo en dos fases: la primera se completará a finales de 2025, permitiendo que el centro productivo, que contará con una plantilla de 48 personas, comience a operar en noviembre de este mismo año, y la segunda se desarrollará a finales de 2026 para alcanzar su plena capacidad operativa en ese momento. Ambas fases, incluyendo la compra del inmueble, suponen una inversión privada de 20 millones de euros.

De esta forma, la delegación sevillana de West Packaging tendrá unas dimensiones y dotaciones equiparables a su centro cántabro. «El objetivo es replicar nuestras instalaciones de aquí en el sur», concreta Carral. La operación forma parte del ambicioso plan de expansión y crecimiento sostenible de West Packaging y permitirá que el grupo supere una capacidad productiva conjunta de más de 40.000 toneladas de cartón al año. El principal responsable de la empresa concreta que los objetivos establecidos en la hoja de ruta establecen llegar a duplicar la facturación, la plantilla y los resultados actuales antes del año 2029. Un crecimiento que quieren apuntalar gracias a varios vectores clave como el auge del packaging en cartoncillo, la actual demanda creciente de soluciones responsables por parte de grandes marcas internacionales y el desarrollo de una infraestructura industrial moderna y altamente eficiente.

Desde su inauguración en 2020, West Packaging ha experimentado un crecimiento sostenido y sólido. Este año, la compañía alcanzará los 28 millones de euros en facturación, y su plantilla supera ya los 150 empleados, a los que ahora se sumarán los 48 empleos directos que generará en la factoría sevillana.