Septiembre 2021

Septiembre es el mes de la vuelta al cole, a los estudios, a la universidad. Es también el último mes del verano, es la época de los coleccionables, de la vuelta a los gimnasios y a la rutina prevista, más que la real. Pero, además, este año, es un mes un tanto especial porque será el primer mes en el que visualicemos el final del túnel de esta pandemia, con la que tenemos que aprender a convivir, por otro lado. Si nada se tuerce en septiembre estaremos todos los mayores de edad vacunados (todos los que hayamos querido vacunarnos) y se comenzará a vacunar a la franja mayor de 12 años y seguramente, más adelante, a menores de esa edad. Esto ¿qué significa? Pues que, por primera vez en casi dos años (al menos así de largos han parecido) vamos a sentir cierta seguridad en la relación social, en el trabajo, en la diversión con otros, en el contacto con familiares y amigos. En septiembre vamos a vislumbrar un final de año unido a un final de ciclo de miedo y dolor. Es cierto que aparecerán sus primeras consecuencias en la salud mental, por las carencias padecidas, pero mayoritariamente nos empezaremos a sentir un tanto liberados, con cautelas, pero con una visión más generosa en relaciones con otros.

En lo personal septiembre será el inicio de un curso escolar, de un nuevo año para toda la sociedad. Empezaremos a hacer planes de futuro (consumos, compras, viajes, fiestas, celebraciones, etc.) y esos planes animarán a toda la industria del ocio, la restauración, la hotelería y el turismo de viajes, liberando de negro futuro a todas las empresas que hayan sido capaces de llegar a esta época de exámenes de recuperación.

Septiembre será la antesala de un octubre y noviembre de cambios progresivos o a saltos, dependiendo de la personalidad de cada cual. Serán meses finales de dos años agónicos, pero serán ilusionantes, al comprobar que una cierta normalidad volverá a nuestras vidas. Nada será igual que antes, pero al menos, tendremos la sensación de recuperar derechos perdidos. Estos tres meses serán el adelanto de unas deseadas Navidades en las que por fin recuperaremos tradiciones de celebración perdidas o anestesiadas por el covid. Así creo que va a ser y le invito a que prepare las maletas para un nuevo viaje a un futuro esperanzador en el que, sin olvidar todo lo que hemos pasado, recuperemos parte de la memoria de comportamiento de tiempos antepasados gracias a la ciencia de la medicina, a los progresos farmacológicos y a los esfuerzos de todos los que nos habéis cuidado. ¡Viva septiembre!