Una violación a una menor en Bilbao, a punto de quedar impune al no practicarse una prueba

La agresión sexual se produjo a mediados de diciembre de 2023. Según declaró un testigo, la joven estaba de botellón con un amigo y con un conocido. A la chica se le veía «bastante pasada» y no recuerda muchas de las cosas que ocurrieron esa noche. Piensa que quizá le pudieron echar algo en la bebida. Básicamente sólo tiene claro verse en el suelo y que al despertar recibió una llamada de sus padres y que la fueron a buscar. La llevaron directamente al hospital, donde se certificó que había sido agredida sexualmente y donde encontraron restos genéticos de otra persona.

Se abrieron dos procedimientos: uno ordinario para el mayor de 18 años y otro para el menor dirigido por la Fiscalía. En el caso del adulto se le sometió a la prueba de ADN y dio negativo. Esta persona había negado en todo momento haber violado a la joven -aunque en unos mensajes sí reconoció haber realizado tocamientos- y señaló al otro implicado. Su causa se cerró, aunque esa decisión está recurrida.

Faltaba la investigación al menor, que se acogió a su derecho a no declarar durante el procedimiento, cuenta El Correo. La Fiscalía solicitó al joven una prueba voluntaria de ADN. La defensa del menor se negó y pidió que se solicitase a Diputación un informe sobre la capacidad real del acusado de acceder voluntariamente a esta prueba, clave en la investigación. También alegaron que padece inmadurez. La abogada de Clara Campoamor tiene claro que estos recursos sólo buscaban dilatar el procedimiento. Los informes determinaron que el joven tiene una discapacidad física del 20%. Es decir, nada que le sirva para librarse de una posible condena o como atenuante.

El asunto -insiste la abogada- es que este informe sobre la capacidad del acusado ya obra en la causa, pero la Fiscalía sigue sin ordenar que se le someta a la prueba genética. Hernando ha remitido varios escritos pidiendo el impulso de la causa y advirtiendo de que la fecha prevista para el final de la instrucción está cerca. En realidad -apunta la letrada- acordar esta prueba no debería llevar más de una mañana. Hernando considera que ha habido tiempo de sobra para realizarla. Por eso, espera que pueda acordarse durante los próximos días porque -insiste- lo que se está investigando es un delito de extrema gravedad.