«Hay que estar cerca de los que más sufren»

-¿Qué ofrece la parroquia de La Asunción al visitante?

-En los últimos veranos venimos ofreciendo a la gente que nos visita, ya sea local o foránea, la oportunidad de conocer mejor un edificio emblemático en Torrelavega. Los turistas se llevan una sorpresa cuando le ven desde la distancia, con ese estilo catedralicio que llama la atención, pero en el interior también guarda joyas como el retablo, las vidrieras, el Cristo de Alonso Cano... Y eso lo podemos hacer porque tenemos la suerte de contar con dos jóvenes, Javier y Paula, que gastan aquí sus vacaciones de manera altruista. Además de ser un servicio gratuito, también es seguro, puesto que un grupo de voluntarios recibe a la gente y se encarga de mantener las distancias y procurar que se use el gel hidroalcohólico y la mascarilla.

-¿Qué hay que hacer para participar en las visitas?

-No es necesario apuntarse. Es suficiente con que los interesados se acerquen a nuestra iglesia de lunes a sábado, de 11.00 a 13.00 horas por las mañanas y de 17.00 a 19.00 por las tardes.

-¿Por qué La Asunción es un referente en Torrelavega?

-Sobre todo, porque es un templo abierto a la gente y sus necesidades. Se inauguró en 1901, así que el próximo día 15, festividad de La Patrona de la ciudad, comenzaremos a festejar su 120 aniversario. El lema refleja lo que esta iglesia ha supuesto siempre: '1901-2021, donde están las personas, ayer, hoy y siempre'. Cuando el entonces párroco don Ceferino Calderón apostó por levantar este edificio en las afueras de la ciudad, muchos le tacharon de loco, pero él se buscó la vida con indianos, empresarios de la zona y los vecinos, siempre comprometidos. Afrontó el reto y consiguió edificar este marco incomparable en el que se vive la historia de Torrelavega, testigo del pasado y el presente de la ciudad.

-¿Ya tienen calendario de actividades para festejar el 120 aniversario del templo?

-Los actos los iniciaremos el 15 de agosto, fiesta de La Patrona, como ocurrió hace 120 años en una mañana lluviosa. Tenemos previstas charlas, conciertos, exposiciones..., pero estamos pendientes de la evolución de la pandemia y también estamos en contacto con la Concejalía de Festejos para ver si es posible incluir algún acto en las próximas fiestas patronales. El día 15 será el pistoletazo de salida de un año que incluirá también conciertos de órgano. No hay que olvidar que el órgano de La Asunción fue declarado por el Gobierno de Cantabria Bien de Interés Cultural y su responsable, Enrique Campuzano, está preparando actuaciones de primer nivel.

-Hablando de retos, ¿cuál es actualmente el suyo al frente de la parroquia?

-Además de seguir llevando el Evangelio a las personas, que siempre es nuestra misión principal, ahora estamos intentando poner a la parroquia en clave de siglo XXI, es decir, arreglarla. Para eso es necesario que la gente no olvide que es una iglesia que siempre está abierta al pueblo y sus necesidades, y que tiene que seguir siendo una referencia social en Torrelavega.

-Van a recibir una importante ayuda en ese sentido con motivo de la celebración del próximo Xacobeo.

-Así es, nos han concedido una importante ayuda de 194.000 euros dentro del Plan Turístico Nacional Xacobeo 2021-22. Hay que valorar la valentía de nuestro consejero de Turismo, Javier López Marcano, para que esta inversión vaya a ser una realidad. Hace muchos años que no se realizan labores de mantenimiento en el interior de la iglesia y hay que destacar problemas de humedades, daños en las vidrieras; la calefacción es obsoleta, lo mismo que la luz y el sonido... Hay que poner La Asunción al día para que acoja también a los peregrinos. Es un momento histórico, clave para el futuro del templo, así que esa ayuda del Xacobeo ha sido una gran alegría.

-Además de los religiosos y las visitas guiadas, ¿qué otros servicios ofrece La Asunción?

-Es una parroquia cuyo componente social siempre ha sido muy importante, siempre estamos dónde están las personas. Está enclavada en una zona en la que hay que estar cerca de los que más necesitan, de los que más sufren. En La Asunción hay, por ejemplo, un centro intercultural (Lacampa) que es un referente de integración. También contamos con una tienda de Comercio Justo que abren todos los días nuestros voluntarios. Ayudamos a la gente en su país de origen para que no tenga que emigrar. Y qué decir de Cáritas, siempre ayudando a los necesitados a comer, vestir, pagar las facturas...

-¿Son muchas las secuelas de la pandemia en Torrelavega?

-Sin duda, pero también hay que recordar que Torrelavega es una ciudad solidaria y sus vecinos siempre están dispuestos a echar una mano. Son gente humilde y comprometida.