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Efe
Miércoles, 29 de agosto 2012, 14:26
El Gobierno de Cantabria trabaja para extender y generalizar la cesión de libros de texto y pedirá a los centros y a los docentes que no los cambien en unos determinados plazos para favorecer el ahorro, pero se trata de unas medidas que no podrán aplicarse este curso, sino el próximo.
Así lo ha indicado a los medios de comunicación el presidente regional, Ignacio Diego, que ha explicado que, de este modo, se quiere poner en marcha una experiencia que ya se está desarrollando en algunos colegios, o en ayuntamientos como el de Piélagos.
La Consejería de Educación trabaja para regular la cesión de estos libros de texto entre familias que ya no los usan y aquellas que sí los necesitan, y quiere "extender" esa fórmula.
Además, se tomarán medidas para exigir a los colegios y a los profesores que no se cambien los libros de texto en unos plazos determinados que se fijarán de acuerdo con entidades como el Consejo Escolar, para que "haya el máximo consenso".
Diego ha recalcado que se trata de "un ejercicio de solidaridad", que busca además el ahorro y "la economía".
"Se trata de un trabajo a la vez solidario y a la vez de economía doméstica", ha remarcado el presidente regional, que ha añadido que ese tipo de iniciativas "funcionan muy bien".
Según el presidente, esta iniciativa puede suponer "una solución práctica para una buena parte del material escolar", para "abaratar" el coste de la vuelta al colegio.
Pero dada la proximidad del inicio de las clases -en Cantabria empiezan el día 13 de septiembre- estas medidas no se podrán llevar a cabo este curso de forma generalizada, sino que habrá que esperar al próximo.
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