El mayor momento de debilidad del líder

Y eso que la temporada empezó de la peor forma posible. El Racing de Ferrol debutó en la primera jornada con una derrota frente a la Arandina. Un tropiezo tempranero que sirvió de espabilo al equipo gallego, porque, a partir de ahí, empezó su dictadura. 16 encuentros consecutivos sin hincar la rodilla. Doce victorias y cuatro empates. En ese lapso de tiempo, concretamente en la séptima jornada, agarró una primera posición de la tabla que ya no ha soltado.

Solo el mejor Racing de la temporada fue capaz de frenar a la locomotora gallega. Las rachas de ambos contendientes se vieron las caras en los Campos de Sport. Esos 16 choques sin perder de los ferrolanos contra las cinco victorias consecutivas de los cántabros. Los de Pedro Munitis fueron superiores e infligieron una dolorosa derrota (3-1) justo en el partido que cerraba el año 2015.

Ese resultado dejó grogui al líder, que se tambaleó en semanas posteriores. El cambio de año no subsanó la herida y el Racing de Ferrol cayó en A Malata frente al Astorga (0-1). Los perseguidores, encabezados por la Unión Deportiva Logroñés, recortaron distancias (a cuatro puntos). La Arandina pagó los platos rotos en la primera fecha de la segunda vuelta (3-0), pero el equipo de Miguel Ángel Tena, que había perdido parte de su solidez, volvieron a marcharse de vacío de su visita a Las Gaunas (2-1). Los riojanos se colocaron a un solo punto de su máximo rival el Racing marchaba en esa jornada 21 a cinco puntos.

En aquel mes de enero también hubo incertidumbre en los despachos de A Malata. Con el mercado invernal abierto, el máximo goleador de la categoría, Joselu, volvía a ser un delantero codiciado por equipos de categoría superior. El que más fuerte apostó fue el Nástic de Tarragona, que multiplicaba la ficha que el jugador percibe en el Racing de Ferrol. Fueron días de nervios a falta de la respuesta definitiva del futbolista. El ariete es un tipo diferente dentro de este mundo del fútbol. No le gustan los lujos no tiene coche, la gomina y los aspavientos. Por eso, al final decidió quedarse en Ferrol para estar cerca de su familia. Miguel Ángel Tena respiró.

El líder se repuso de aquellos momentos de flaqueza sobre el césped y en el vestuario. Y volvió a apretar con fuerza el acelerador. Siete encuentros consecutivos sin conocer la derrota que le llevó a poner de nuevo tierra de por medio con sus perseguidores.

Sin embargo, el cántabro Ángel Viadero echó una buena mano al equipo de su tierra. El Burgos al que dirige, sin apenas ambiciones en esos momentos de la temporada, tumbó al líder y le sumió en la actual racha de resultados plena de dudas. Porque el Racing de Ferrol salió de El Plantío con un importante tembleque en las piernas. Ganó los dos siguientes compromisos frente a Guijuelo y Cacereño. Pero ya no era lo mismo. Esa imagen de solvencia y seguridad había quedado debilitada, como se pudo comprobar en las fechas posteriores.

El Racing de Ferrol empató en casa (0-0) frente al rocoso Tudelano y solo pudo arañar un empate (1-1) de su desplazamiento a Villaviciosa. Unas inseguridades que culminaron en la derrota cosechada en la jornada 34, en casa, frente a una Sociedad Deportiva Compostela que apuraba sus escasas opciones de permanencia. Racing y Tudelano recortaban distancia inexorablemente. El líder ganó de penalti al Celta B y empató a cero frente al Coruxo, los resultados que traen ambos contendientes a la situación actual. El momento de mayor debilidad de la temporada para los gallegos. Para los racinguistas, los números son positivos, pero la imagen, no tanto. Siempre dicen que en los clásicos los antecedentes quedan aparcados. La solución, el sábado a las 18.00 horas.