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La calle está cortada entre Santa Lucía y Peña Herbosa.

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La calle está cortada entre Santa Lucía y Peña Herbosa. María Gil Lastra

La calle Lope de Vega, abierta en canal para cambiar todo el saneamiento

La columna vertebral de esta vía mide 195 metros y es un viejo colector de ladrillo macizo que está siendo sustituido por tuberías de pvc

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Miércoles, 27 de diciembre 2017, 07:26

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La calle de Lope de Vega, abierta en canal desde hace días, muestra descaradamente a los vecinos su estructura interior. Sus canalizaciones, sus tuberías, el agua del saneamiento que corre calle abajo (y que huele bastante mal) y los viejos adoquines de esta tradicional calle, desde cuyo alto hay una imagen mil veces fotografiada de la bahía. La columna vertebral de la calle mide 195 metros y es el colector del saneamiento, el viejo de ladrillo macizo, que está siendo sustituido por tuberías de pvc, de color naranja.

Las obras son parte de la reforma de esta calle que se aborda al tiempo que se realiza la instalación de dos tramos de rampas que subirán desde Daoiz y Velarde hasta Bonifaz (la primera) y desde Bonifaz a Santa Lucía la segunda. Integran el proyecto de mejora de la movilidad que llegará hasta la Finca de Jado, en el paseo del General Dávila. Parte de este trayecto se realizó hace años, el que se encuentra en la calle de Santa Teresa, y ahora a él se unen dos tramos más; uno hacia la Finca de Jado y otro hacia el muelle, atravesando Lope de Vega y el lateral Oeste de la Iglesia de los Carmelitas. Precisamente en este tramo, se está llevando ya a cabo la excavación de los fosos de la rampas número 3 del proyecto, situada en la calle Carmen Entrehuertas, con el fin de proceder a la localización de los servicios existentes y su posterior desvío. Todo forma parte del amplio proyecto que comunicará el Paseo de Pereda con estructuras mecánicas (rampas, ascensores y escaleras) con General Dávila.

Los antiguos ladrillos

Los trabajos que se están realizando en Lope de Vega, con la calle abierta y cortada desde hace un mes al tráfico, son la sustitución del viejo colector de saneamiento, una obra 'de fábrica' en el lenguaje de los ingenieros, en forma de ovoide cuyas dimensiones son 52 x35 centímetros y que está siendo sustituida por una tubería de pvc de doble pared corrugada de 1000 milímetros desde el cruce con la calle Ataúlfo Argenta hasta Daoiz y Velarde (83 metros lineales) y de 800 milímetros desde el cruce con la calle Daoiz y Velarde y Santa Lucia (en total 112 metros lineales).

La obra en la calle se inició el pasado 17 de septiembre y estará acabada a mediados del mes de julio de 2018. Ha supuesto que desde esa fecha 36 coches no pueden aparcar en el barrio. Cuando acabe la actuación habrán desaparecido 16 plazas, en la acera oeste, por la que transcurrirán las rampas mecánicas de subida hacia la iglesia de los Carmelitas. La empresa Ascán desarrolla los trabajos, con un coste de 1.358.279 euros.

Las rampas, en el mes de julio

A mediados de julio del año próximo, la calle de Lope de Vega tendrá las dos rampas mecánicas, nuevos árboles y nueva calzada. Y bancos para sentarse, por primera vez en su historia. Los vecinos esperan que todo esté finalizado y en estado de revista antes de la multitudinaria procesión con la imagen de la Virgen del Carmen, del 16 de julio, que discurre por esta calle y baja hasta el muelle. En Lope de Vega se plantarán perales de flor y ciruelos, para dar a la calle más colorido con flores blancas y hojas rojas. En la acera Este seguirán los tradicionales plátanos de sombra.

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