Los productores de arándanos reclaman ayudas ante los daños causados por el calor

Los productores de arándanos de toda Cantabria han pedido a la Consejería de Medio Rural, Pesca y Alimentación la adopción de medidas «de carácter urgente» que compensen las pérdidas del sector ocasionadas por la ola de calor del pasado mes de julio, en la que se alcanzaron temperaturas de hasta 40 grados que dañaron sus cultivos haciéndoles perder en algunos casos hasta 10.000 kilos de producto.

Los damnificados explican que, como consecuencia de las altas temperaturas de los días 18 y 19, existe una disminución del rendimiento del cultivo que estiman aproximadamente en un «40%», cifra que está muy por encima del umbral del 20% que marca la Comisión Europea para conceder ayudas en estos casos en periodos de sequía. A la par, contradicen las afirmaciones realizadas por el consejero de Medio Rural, Jesús Oria, cuando declaró que los seguros agrarios sí cubrían las pérdidas de producción.

Una veintena de productores de toda la región ha registrado un escrito en la Consejería de Medio Rural en el que reclaman ayudas al sector afectado por la ola de calor, que en algunos casos «achicharró»el producto, puesto que el arándano es una fruta de zonas climáticas templadas y húmedas por lo que no pudo soportar el calor vivido en esos días.

Según los cálculos de los agricultores afectados, solo las explotaciones que representan habrían perdido ya más de 75.000 kilos de arándanos y unas 57.000 plantas habrían visto reducida su producción para próximas cosechas. Los productores mencionan en el escrito registrado en el Gobierno de Cantabria que en «la Ley 87/1978, del 28 de diciembre de Seguros Agrarios Combinados», que maneja el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, no se contempla este fenómeno natural en la cobertura de los seguros». «Por todo ello suplicamos a esta Consejería dicen la adopción con carácter urgente de un conjunto de medidas encaminadas a reparar los daños sufridos. Dichas ayudas, según especifican, estarán orientadas a la «compensación por la pérdida de renta», por disminución de la producción planificada «debido a los daños en el fruto y en la planta». A la par, defienden que este tipo de subvenciones están contempladas en el reglamento europeo que regula determinadas categorías de ayudas a los sectores agrícolas.

En su momento el consejero Jesús Oria dijo que aunque la ola de calor no representaba un periodo de sequía, «los agricultores saben que existen unos seguros agrarios que sirven tanto para estos soles como para granizadas que acaben con una cosecha de ese tipo» sin embargo, alegan los productores no será suficiente.