La jueza mantiene en libertad al investigado por la estafa en Novo Banco que tendrá que comparecer semanalmente

En concreto, se ha decretado la retirada del pasaporte, la prohibición de salir del territorio nacional y la comparecencia semanal ante el juzgado. A corto plazo, el investigado seguirá en libertad. A pesar de las dimensiones del presunto desfalco, que a tenor de la documentación entregada en la Fiscalía por Vidal -en todo momento él habla de «malas inversiones» y no de desvío de dinero ni enriquecimiento- podría rondar los 50 millones euros, no se ve necesaria su entrada en prisión.

La resolución explica que «no se reúnen los requisitos necesarios» para el ingreso en prisión, «considerando que debe ser una medida excepcional y que en este momento pueden adoptarse otras medidas para la finalidad pretendida y proporcional al fin perseguido, como es la no sustracción a la acción de la justicia».

En este sentido, la juez pone de manifiesto que «debe valorarse que el investigado no sólo compareció a la Fiscalía para autoinculparse, sino que, además, ha comparecido ante el llamamiento judicial», al asistir ayer a la comparecencia de medidas cautelares, «habiendo puesto a disposición todo su patrimonio, sin posibilidad de obstruir la instrucción, dado que no trabaja en la entidad y no tiene acceso a la documentación». Recuerda el auto que la adopción de la prisión provisional es «excepcional, subsidiaria, provisional y proporcionada a la consecución de los fines en ella perseguidos».

Por ello y aunque existen «indicios de criminalidad y autoría, esencialmente porque es el propio investigado quien ha reconocido los hechos, siendo él quien se presentó en la Fiscalía para poner en conocimiento los mismos», en cuando a los fines exigidos para la adopción de la medida de prisión considera que «no se entiende que concurran ninguno».

Así, entiende la juez que «actualmente no se deduce riesgo de fuga» y añade que «la gravedad abstracta de los delitos y de las penas y la alarma social inherente al delito no bastan para justificar la prisión» y que hay que tener en cuenta «las circunstancias del caso y las personales del investigado», entre otras el «arraigo familiar, profesional y social» o el estado de la causa.

Este escenario era el más probable, según distintos expertos. En situaciones de este tipo, es habitual que se decrete el ingreso en la cárcel, lo que ocurre es que este caso tiene algunas características que lo hacen diferente. La primera tiene que ver con el origen de la denuncia. Aunque los afectados están convencidos de que la defensa de Vidal pidió cita para que su cliente declarara voluntariamente ante la Fiscalía cuando se vio acorralado y la mentira ya era totalmente insostenible, esto puede ser un atenuante del que se beneficie llegado el caso. A esto se suma el propósito de enmienda, ya que manifestó su intención de reparación del daño con su patrimonio personal.

El auto se ha emitido el día en el que, inicialmente, estaba prevista la primera declaración de Jacobo Vidal ante el juzgado. Una cita que no se pudo celebrar por problemas burocráticos relativos a la notificación de la citación. Aunque no declaró, si que compareció en el juzgado. En cuanto se solventen, el investigado volverá a ser convocado, previsiblemente en los próximos días. También está pendiente que la jueza encargada del caso permita el personamiento en la causa de los afectados y también que solicite el testimonio de otras personas relacionadas con los hechos. Desde el comienzo la Fiscalía ha dejado abierta la puerta a que el número de imputaciones aumente a medida que se van clarificando los entresijos de una presunta estafa en la que se han visto envueltos conocidos empresarios de la capital.

Por su parte, la filial en España de Novo Banco también está avanzando en su investigación interna, que todo apunta a que desembocará en acciones judiciales. Un proceso «muy complejo» por la maraña de documentos existentes, ya que para ocultar las pérdidas, Vidal realizaba transferencias cruzadas que dificultan el seguimiento del rastro del dinero.

De lo que haga la entidad portuguesa están muy atentos los afectados -medio centenar de ellos agrupados en torno a dos despachos de abogados de Santander-, que quieren saber cuanto antes si el banco responderá por el capital perdido, cuándo y en qué medida. Su intención es agotar la vía de la negociación. Después, si la respuesta de Novo Banco no es la que esperan, están preparándose para formalizar una reclamación judicial.