El Ministerio asegura que los nuevos trenes cumplen plazos y estarán en 2026

Tras la cadena de incidentes y averías que pusieron en jaque el trazado ferroviario la semana pasada, el propio titular de Fomento anunció que se reuniría la Mesa del Ferrocarril «con todas las partes implicadas». Así, ayer, el grupo de trabajo exigió al Gobierno central que los nuevos trenes lleguen en 2026, tal y como se comprometieron.

El consejero de Fomento, Roberto Media, que presidió la reunión, también reclamó que las obras de duplicación de vía entre Santander y Muriedas, que están obligando a hacer transbordos en autobús, terminen en diciembre, según los plazos previstos. «Había sus ciertas dudas en algún miembro de esta reunión sobre si esos trenes de Cercanías se van a empezar a construir ya. El compromiso del Gobierno central es que deben estar construyéndose ya antes de que concluya el año», aseguró.

No obstante, Media confirmó que en enero acudirá a la sede de la empresa que fabricará las máquinas, Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF), en Beasain (Guipúzcoa), «para comprobar verdaderamente si esos trenes se están fabricando». Y añadió: «No es que lo dude, pero tengo claro que mucho mejor verlo para tranquilidad de todos los usuarios de las Cercanías de Cantabria».

El encuentro estuvo conformado por miembros del Gobierno de Cantabria, Renfe, Adif, la Delegación del Gobierno, la Autoridad Portuaria, sindicatos y patronal, la Universidad de Cantabria, los grupos políticos con representación en el Parlamento, las Mesas de Movilidad y la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (Cocemfe).

Otro de los temas que abordaron durante la reunión, que duró hora y media, fueron las consecuencias de la implementación del ASFA Digital, un sistema de seguridad que permite la supervisión de la velocidad y recuerda al maquinista en todo momento la señal que ha reconocido. Así, la idea es que Adif y Renfe realicen las implementaciones técnicas «para que en un plazo de unos 18 meses» se puedan recuperar las frecuencias, ganar tiempo y acabar con los retrasos.

A pesar de que Media salió de la reunión con «buena sensación», los representantes de los usuarios fueron más cautos. «Queremos destacar que se hayan ido dando pasos en materia ferroviaria. Aun así, quedan más cosas por hacer. Queremos poner el foco, y así lo hemos manifestado, en las pequeñas actuaciones que no requieren de grandes partidas presupuestarias», relató Sergio Peña, portavoz de las Mesas de Movilidad en la reunión. «Hablo de acciones como la reparación de máquinas dispensadoras de billetes que llevan años estropeadas o la mejora del estado de los aseos en las estaciones, que en muchas ocasiones es deplorable», detalló. En este sentido, agradeció al Ministerio la creación de un grupo mixto entre Renfe y Adif para trabajar en la mejora del sistema de información al viajero.

La Mesa del Ferrocarril abordó más asuntos. Entre ellos, la eliminación de cuatro pasos a nivel: en Ontoria (Cabezón de la Sal), Ramales, Ceceñas (Medio Cudeyo) y La Acebosa (San Vicente de la Barquera). «Y si hay capacidad presupuestaria se suprimirá uno más», explicó Media, pero no especificó en dónde. La financiación de esta actuación se acometerá al 50% entre el Gobierno central y el autonómico, aunque todavía se está estudiando cómo realizar los proyectos y aún deben reunirse los técnicos con los alcaldes para estudiar las alternativas.

También se habló sobre el impulso de aparcamientos disuasorios en varias estaciones de Cantabria, «para evitar desplazamientos en vehículos privados hasta las grandes ciudades». Aún se está tramitando el contrato para hacer el estudio que determine en qué estaciones concretas se habilitarán.