La Liga Femenina da otro salto hacia adelante

La primera gran batalla entre ambas llegará pronto, en la segunda jornada. «Competimos en casa, que juega a nuestro favor. Estamos con muchas ganas», reconoce Marta Castillo, jugadora de las campurrianas. Y es que el factor bolera, en este caso, sí puede ser decisivo ya que el corro situado a orillas del Pantano del Ebro es un feudo inexpugnable para las peñas visitantes. «Tiene algo que a las de casa las da más fuerza, no sé qué tiene pero lo tiene», asegura Laura Abascal, capitana de la Bolística y que también vistió el polo de Campoo. «Yo mientras jugué nos agarrábamos mucho y desde fuera cuesta mucho ganar». La de Riotuerto reconoce que el choque «es uno de los cruciales este año».

La disputa del título es uno de los alicientes de un año clave para el futuro de la categoría. Con el apoyo de las instituciones y el programa Bolos en femenino el aspecto económico repercutirá menos que en otras categorías, aunque la crisis sí puede hacer mella en el número de jugadoras, que ya actualmente es escaso. «Necesitamos jugar para seguir adelante», afirma Alba Gutiérrez, jugadora de Casar de Periedo, «que se vea que hemos salido y hemos luchado por los bolos. Al principio no pensábamos jugar por el tema económico, no podíamos, pero al final hemos decidido tirar para adelante».

Para Mayka Rodríguez, de Atlético Deva, no jugar «podía haber afectado bastante. Las jugadoras se pueden ir desanimando, el público también. Está bien que haya Liga». Cuando sonaron los tambores para incorporarse a las filas ligueras, la capitana de las de Unquera reconoce que no hubo dudas, aunque el final de curso se les plantea complicado. «Desde el principio dijimos que íbamos a jugar y nos comprometimos. Ahora tres de nuestras jugadoras están con la EBAU, luego viene la Universidad y eso nos preocupa».

Ilusión y ganas de empezar son las palabras que más utilizan las jugadoras para afrontar una competición que se pone en marcha mañana sábado con el duelo en Cabezón de la Sal entre Casar de Periedo y Carandía. La capitana de las visitantes, Alba García, afirma que el día del estreno siempre es especial. «Afrontamos la Liga con algunos nervios, porque hay dos chicas en edad escolar que no han jugado nunca la competición. Es un año complicado pero tenemos ganas de empezar. Teníamos dudas sobre si jugar o no, porque tenemos una bolista de riesgo, pero siguiendo el protocolo se puede jugar una Liga segura. El objetivo es disfrutar».

Para Tamara Santamaría, capitana de San Lorenzo, estos meses también han sido «raros», especialmente porque han tenido que tomar decisiones que trascienden lo deportivo. «En general la decisión ha sido unánime, la peña quería jugar y nosotras hemos dicho que sí. Hemos entrenado cada una por su cuenta como ha podido, pero la afrontamos como otra temporada normal cumpliendo todas las medidas de seguridad que hay que cumplir».

De las diez peñas inscritas en el mes de enero se han quedado por el camino Zurdo de Bielva, La Carmencita y Concejón de Ibio y, con respecto al pasado año, se incorpora El Pendo Camargo, antiguo Puertas Roper, que tras el impulso del Ayuntamiento este año estrena partida femenina. «Jugamos un amistoso la semana pasada y empezamos muy nerviosas, luego ya fuimos cogiendo el ritmo, pero el peso de la camiseta se nota y hay que dejar el listón alto», afirma la jugadora Blanca Ruiz.