«Es el título que ansía todo el mundo»
El de Peñacastillo aumenta su palmarés, pese a su juventud, tras la consecución de un Campeonato de España que se le había resistido hasta ahora s
Víctor González (El Astillero, 1994) vive para ser campeón. Su concentración en la bolera, sus rituales antes del tiro o su frialdad en los peores momentos recuerdan a grandes deportistas de la historia. Una determinación que le ha llevado a ganar tres de los cuatro grandes campeonatos esta temporada y a convertirse en la referencia en el mundo de los bolos.
-¿Alguna vez se había tomado tantas fotos como el viernes después de bajar del podio?
-Yo creo que no, no recuerdo un día de tantas fotos.
-El Nacional era el título que le faltaba para completar el palmarés.
-La verdad es que sí. Es el título que ansía todo el mundo y todavía no lo había conseguido.
-Además, sirve para redondear una temporada casi perfecta.
-Sí, a pesar de que todavía quedan concursos y competiciones importantes, no puedo pedir más. Hemos ganado todo por equipos, en parejas hemos ganado el Campeonato Regional y a nivel individual el Nacional y el Regional. Es impresionante.
-Segundo en Treceño en 2017 y tercero el año pasado en Torrelavega. ¿Se ha quitado la espinita?.
-No tenía ninguna espinita clavada con el Nacional. Sabía que si seguía haciéndolo bien como en los últimos años podría llegar el título algún día y por fin ha sido así y ha llegado.
-Antes del Regional señalaba que el objetivo era ir sumando bolos y aumentar los registros en los concursos. Lo ha logrado hasta el punto de batir su propio récord.
-No pensaba en ningún momento en batir el récord. Pensaba en el bola a bola y sumar todos los bolos que pudiese con cada una. Y así he hecho desde la primera, desde el minuto uno y hasta que he terminado.
-Hace un año la sensación era que la marca de 751 bolos iba a durar muchos años. Se ha mantenido exactamente 377 días.
-Sí, la verdad es que nadie esperaba que se pudiese batir tan pronto y de tal forma. Cuando juegas ni piensas en ello. Piensas lo primero en jugar bien y luego en ganar. Una vez que consigues ambas cosas, llegan estos registros. Y una vez logrado ya te das cuenta de que es impresionante.
-Pese a la ventaja de 35 bolos antes de la final y a la sugerencia de los anotadores no quería firmar el acta antes de jugar, por si acaso
-No, yo hasta que no acabase la final no iba a firmar, porque nunca sabes qué puede pasar. No hay que adelantar los acontecimientos, todo llega a su momento.
-¿En qué momento se vio campeón?
-Hasta que no llegaron las cuatro últimas tiradas no lo había visto claro. A partir de ahí ya vi que lo tenía más asequible. Siempre hay que tener precaución, porque en los bolos puede pasar cualquier cosa. Por eso, hasta superado el ecuador del concurso no lo he visto hecho.
«No tenía ninguna espinita clavada con el Nacional. Si hacía bien las cosas, sabía que llegaría»
-El campeonato se jugaba en su bolera, en la que se ha criado como jugador. ¿Eso suponía una motivación o una presión extra?
-No creo que fuera una motivación o una presión extra. Lo afronté igual que si hubiese sido en cualquier otra bolera, con la ventaja quizá de que conozco más el corro, pero al final está para todos igual.
-Ya antes de empezar se hablaba de dos grandes favoritos: Óscar y usted. ¿Tampoco eso suponía más presión?
-Eso es para la gente, yo no pienso en lo que dicen. Sólo pienso en hacer mi trabajo lo mejor que pueda.
-Otro de los nombres sobre la mesa era el de Salmón, aunque no llegaba en su mejor momento.
-Sabiendo que no estaba lo más fino que podía estar, yo sabía que era un rival muy duro de batir, que en cualquier momento reacciona y te complica las cosas y se ha demostrado. Al final ha sido tercero sin hacerlo a su mejor nivel.
-Tiraba el último en cuartos de final. ¿Es una ventaja hacerlo sabiendo que sus máximos rivales no habían hecho grandes registros?
-He intentado afrontar el torneo intentando no saber los registros de los demás en cada ronda, pero al final es imposible no enterarte. Te da una cierta tranquilidad saber que los rivales más difíciles se habían ido cayendo.
-Uno de los objetivos era que no se quedasen bolas en la caldera, sabedor de su gran potencial desde el birle.
-Llevo un año en el que estoy jugando desde dieciséis bastante fuerte, sin arriesgar en exceso. Siempre intentas mejorar las cosas, pero hay circunstancias que no te permiten tirar más suave. Quizás miedo, quizás desconfianza. Al final intentaba sumar todos los que pudiese de tiro, a birlar fuese donde fuese, y a derribar los máximos bolos posibles.
«Cuando estás en el punto de mira de la gente, debes hacerlo lo mejor posible. No te puedes relajar»
-¿Cómo ha vivido la polémica arbitral de los últimos días?
-He estado al margen de todo. Me lo han comentado, pero tampoco he hecho mucho caso.
-¿Cómo es la preparación en el día a día de un campeón de España?
-Depende de las circunstancias. Si estoy metido en julio o agosto, que hay muchas competiciones, el día que tengo libre prefiero descansar. Pero en los meses anteriores, cuando hay varios días libres, suelo entrenar. Depende también de muchas cosas; te vas controlando en función de cómo estés de juego y la confianza que tengas.
-¿De dónde le viene la fuerza mental necesaria para mantener la concentración tantas tardes durante la temporada?
-Todo se entrena. Todo lo que se ve se puede entrenar y se debe entrenar. Para estar al máximo nivel hay que prepararse en todos los sentidos. Yo intento estar concentrado siempre al máximo en cada bola, que al final es clave para jugar bien.
-¿Es ese secreto de Víctor González?
-Una de las claves. Los pequeños detalles son los que marcan la diferencia y pequeñas cosas como esa son las que me hacen ser mejor jugador.
-Este año ha ganado tres de los cuatro campeonatos oficiales, pero menos concursos del Circuito. ¿Ha sido parte de la planificación?
-Ha coincidido así. Al principio no comencé al mejor nivel, pero la semana antes del Regional ya fui mejorando, cogiendo un ritmo bastante mejor y por circunstancias y por los rivales no he podido ganar más concursos.
-¿Cómo se mantiene la ambición después de haberlo ganado todo?
-De momento pienso en los concursos que vienen, en intentar hacerlo lo mejor posible y si puedo estar arriba, mejor.
-A nivel de peña han ganado los cinco títulos en juego. Además, sabiendo sufrir.
-Hemos sufrido todo el año, aguantado mucha presión y comentarios externos. Ha sido muy complicado, pero al final se ha demostrado la calidad que tenemos, el equipo que somos y que hemos hecho las cosas bien.
-¿Le queda algún sueño por cumplir en el mundo de los bolos?
-El sueño es seguir agradando al público, haciendo las cosas bien, tirando todos los bolos que pueda y ganar el máximo de competiciones posibles.
-En un deporte pequeño como los bolos, ser la máxima figura también conlleva una responsabilidad.
-Siempre que estas en el punto de mira de la gente tienes que intentar hacerlo lo mejor posible, mantener las formas y demostrar tu nivel día a día. No te puedes relajar.
«Estoy a gusto y quiero seguir aquí»
En una peña como Peñacastillo, con su familia involucrada al máximo en el día a día de la bolera de Cañas, Víctor González no se ve en otro sitio, aunque sabe que las cosas pueden ser distintas en algún momento: «Nunca se sabe, las circunstancias de cada momento lo dirán. La vida es así, nunca se sabe cuándo puede cambiar, si hay equipos nuevos o no. Yo estoy muy contento en la peña, he conseguido todo aquí, estoy muy a gusto con los compañeros y la directiva y quiero seguir aquí».