El terror de los anfitriones

El nombre del Racing sigue teniendo su caché en la Segunda B. 44 temporadas en Primera División no pasan desapercibidos allá por donde viaja el equipo verdiblanco. Sin embargo, como del pasado se vive poco, es mejor quedarse con las cifras presentes. Y lo que realmente causa preocupación en los anfitriones son los números del conjunto cántabro como visitante. El mejor del grupo, con una diferencia aplastante: en total, son 31 de 42 en juego, los puntos que se ha llevado de souvenir el Racing en los catorce viajes que ha realizado en lo que va de campeonato liguero.

Tal es el rendimiento racinguista a domicilio, que ha logrado sacar un punto más que en su propio feudo, en los Campos de Sport. Profeta fuera de su tierra. De Santander se han marchado doce puntos desde agosto. No son malos números. Pero teniendo en cuenta lo difícil que es siempre puntuar a domicilio, las cifras verdiblancas como visitante son excepcionales.

Del resto de equipos del grupo, sólo Cultural Leonesa y Celta B se acercan a los guarismos racinguistas. Aunque bastante lejos. El líder acumula ya 25 puntos fuera del Reino de León, con un balance de siete victorias, cuatro empates y tres derrotas. Mientras tanto, los gallegos, en tercera posición de la tabla, suman 24 puntos después de siete victorias, tres empates y cuatro derrotas. El equipo cántabro cuenta con nueve victorias, cuatro empates y solamente una derrota.

Una derrota que se produjo allá por el 23 de octubre, cuando el Racing visitó a la Ponferradina en el debut de Pedro Munitis en el banquillo berciano. Jornada 10. De hecho, fue el primer partido que perdió el equipo de Ángel Viadero, que inició la temporada con una gran racha de nueve choques invicto en Liga. En El Toralín, el Racing cayó por un gol a cero en un mal partido de los verdiblancos.

En todos los demás estadios que ha visitado, el conjunto cántabro ha conseguido atropar puntos. El Racing ganó en Ferrol (0-1) y en Villaviciosa por el mismo resultado. Posteriormente, goleó a Osasuna en Tajonar. Tras caer en Ponferrada y pasar por un pequeño bache de resultados, el equipo cántabro se rehizo en Boiro (0-1). Llegó la sufrida victoria en Mieres ante el Caudal (2-3). Y ya en 2017, el Racing encadenó tres visitas consecutivas con victoria, todas ellas con el mismo resultado de 0-1: Palencia, Pontevedra y Burgos.

Por otro lado, los empates del Racing a domicilio son el de la segunda jornada en Barreiro frente al Celta B; el de Somozas; frente a la Mutilvera y el último contra el Valladolid B. Todos ellos con el mismo resultado. Empate a un gol. En Vigo y en Somozas el equipo cántabro recuperó un punto después de ir por detrás en el marcador, mientras que en Mutilva y Pucela, fueron los rivales los que consiguieron poner las tablas cuando el conjunto verdiblanco había anotado primero.

Más allá de lo importante que resulta sumar a domicilio para un equipo con las ambiciones del Racing, de cara al futuro, el rendimiento verdiblanco como visitante es una auténtica garantía de cara a un play off para el que los de Viadero cada vez tienen más cerca certificar su participación. En unas eliminatorias en las que los goles fuera de casa valen doble, sacar un resultado positivo lejos de los Campos de Sport puede resultar decisivo a la hora de pasar de ronda o, si las cosas van mejor aún, sellar el muy ansiado ascenso a Segunda División.

El terror de los visitantes aún tiene cinco partidos más a domicilio. De hecho, el próximo puede ser el más importante. Decisivo de cara al desenlace final del campeonato regular. El equipo cántabro visitará el próximo 19 de marzo, Día del Padre, al líder, la Cultural Leonesa. Un choque que puede colocar a ambos contendientes en una posición casi definitiva en la lucha por el título. Con las ventajas que ofrece ser primero de cara a afrontar el play off de ascenso para dar el salto al fútbol de élite.

A partir de ahí, el calendario es, a priori, favorable para los intereses verdiblancos. También lejos de Cantabria. El fin de semana del 1 y 2 de abril, en la jornada 32, el Racing tendrá que afrontar el desplazamiento más largo del grupo. Hasta Coruxo. El equipo gallego ha ido de menos a más y, de hecho, con sus últimos resultados se aferra aún a sus opciones de meterse en un cuarto puesto que ahora mismo tiene a siete puntos. Posteriormente, el 15 o 16 de abril, la visita será a la Arandina, que apura sus últimos hilos de permanencia, con siete puntos de desventaja con los enemigos que marcan la línea de peligro.

Catorce días después, los de Viadero tendrán un compromiso en el campo de hierba artificial de Guijuelo. El cuadro chacinero poco tiene que ver con el de la pasada temporada, y también se encuentra peleando por mantenerse en Segunda División B. A día de hoy, Mutilvera y Caudal le aventajan en cinco puntos.

El Racing cerrará la temporada en Estella, frente al Izarra. El campo de Merkatondoa, de hierba artificial ya muy antigua, no es un buen lugar para jugarse nada. Sin embargo, para entonces, lo más probable es que los navarros, situados en la zona media de la tabla, tengan la permanencia asegurada. Con 35 puntos, ya les queda poco para certificar una temporada más en la categoría. Si en Estella el Racing cumple con su buen hacer como foráneo, la jornada puede terminar en fiesta. La solución, en el mes de mayo.