Tercera persecución policial en cuatro días: esta vez un conductor ebrio, drogado y sin carné

El último, sucedido la noche del martes en Santander, tuvo como protagonista a un hombre que huyó de la Policía Local de la capital a gran velocidad hasta Camargo. Una vez que fue interceptado se comprobó que no tenía vigente el permiso de conducir y que estaba reclamado por la justicia, además de dar positivo en drogas y alcohol.

Según fuente policiales, los hechos tuvieron lugar sobre las 23.55 horas del martes, cuando los agentes observaron un turismo que circulaba a una velocidad «desproporcionada» por la calle Hermanos Calderón, en dirección a la avenida Primero de Mayo. Al verlo, los uniformados accionaron los dispositivos luminosos y acústicos del coche patrulla para advertir de su presencia y para que el vehículo detuviese la marcha, a lo que su conductor hizo caso omiso, huyendo del lugar a gran velocidad e iniciándose una persecución en dirección al municipio de Camargo.

Durante la carrera, el implicado, que circuló a velocidad muy elevada por calles con badenes limitadas a 30 y 50 kilómetros por hora, estuvo a punto de perder el control del coche y rebasó semáforos en rojo en los cruces. Finalmente, fue detenido en la confluencia de la carretera Bezana-Muriedas y la CA-306, tras colisionar contra el bordillo de una acera, sin ocasionar daños materiales.

Una vez identificado, resultó ser un hombre de 32 años, con iniciales F. H., y se comprobó que tenía en vigor una pérdida de vigencia del permiso de conducir dictada por un Juzgado de lo Penal de Santander. Los policías instruyeron diligencias judiciales contra él por conducir sin tener vigente el carné y otro por hacerlo de forma temeraria y a velocidad excesiva.

Además, se comprobó que pesaba sobre él una orden de búsqueda, detención y presentación emitida por un Juzgado de Instrucción se Santander, por lo que también se instruyeron diligencias por este motivo.

No hay que remontarse mucho en el tiempo para encontrar otro caso similar: en la madrugada del sábado otro hombre fue detenido, también por la Policía Local de Santander, tras conducir de forma temeraria desde el Paseo de Pereda hasta Orejo (Marina de Cudeyo). Este sujeto cogió el coche tras consumir alcohol y drogas y puso en peligro al resto de conductores y a los propios agentes hasta que fue interceptado. Y unas horas antes de este último caso, sucedió algo parecido en Torrelavega. Los agentes de la Policía Local de la capital del Besaya se encontraban haciendo un control rutinario en el Barrio Covadonga cuando un vehículo escapó a gran velocidad y fue finalmente interceptado en Campuzano.