La Banda Municipal de Torrelavega llega al «límite» con sólo 15 músicos, la mitad de los necesarios

Así lo confirma su director, Alfonso Díaz Casado, que está al frente de la Banda desde que se inició este siglo y primero fue músico durante 25 años. Los integrantes de la agrupación son personal municipal fijo a tiempo parcial -cumplen el 28% de la jornada-. Una vez recuperada la normalidad después de la pandemia, ensayan cuatro días a la semana y participan en conciertos, pasacalles...

Díaz Casado tiene claro dónde está el problema: «Casi todos los servicios municipales son deficitarios en personal, pero el Ayuntamiento poco a poco va cubriendo las bajas de la Policía Local, los Bomberos, la limpieza viaria... Los atiende a todos menos a la Banda de Música, que sigue perdiendo efectivos porque la gente se jubila, se pone enferma o pide una excedencia». «El resultado -añade- es que sólo me quedan quince músicos y tres están de baja. Así no se puede hacer nada, ni actuaciones ni pasacalles... Lo estamos haciendo, pero en precario».

El director recuerda que la última vez que el Consistorio cubrió plazas en la agrupación fue hace dos décadas, durante el mandato como alcalde de Javier López Marcano. «Llegamos a ser 22 o 23 -explica- y desde entonces no han vuelto a sacar una convocatoria. Nos faltan instrumentistas de todo, viento, cuerda y percusión. Necesitamos casi el doble de músicos de los que tenemos para ser una banda normal. Ahora es muy pobre».

Díaz Casado dice que la Banda del Ayuntamiento de Santander tiene «otro nivel» y explica por qué: «No se puede comparar. Ellos tienen jornada completa y son profesionales. Todos tienen carrera y aquí sólo tenemos tres o cuatro, el resto digamos que son aficionados que hacen lo que pueden y a tiempo parcial. Yo mismo sigo figurando como director accidental».

La actividad de la agrupación se incrementa durante las grandes celebraciones populares de la ciudad, como las fiestas patronales o las navideñas. La Banda actúa estos días en recitales, pasacalles... Anoche ofreció su tradicional concierto de villancicos en la Plaza Mayor, al que asistieron cientos de vecinos.

Para paliar la precariedad de la agrupación, que cumplió 100 años en 2012, el director venía sugiriendo al Consistorio algunas medidas, como la de sufragar los gastos de aprendizaje y prácticas a alumnos de la Escuela Municipal de Música, y por fin parece que le han hecho caso, aunque no está satisfecho. «Es una medida insuficiente porque no soluciona el problema de la Banda a corto plazo y es ahora cuando necesitamos que nos echen una mano», afirma.

Díaz Casado se refiere al proyecto de Big Band (Banda Grande), presentado la semana pasada por la concejala de Cultura, Esther Vélez, y la directora de la Escuela Municipal de Música, Nuria Obeso. Concretamente, el Ayuntamiento ofrecerá diez becas a jóvenes de entre 13 y 18 años para formarse en la Escuela Municipal de Música, con el objetivo de «reforzar» la Banda.

Según Vélez, es una iniciativa «piloto e innovadora» que también tiene como misión generar «sinergias y nuevas oportunidades» para los jóvenes aficionados a la música. La Big Band incluye formación práctica en la Banda Municipal y el préstamo del instrumento si fuera necesario. Las becas tendrán una duración de dos años y se desarrollarán de septiembre a junio, coincidiendo con el calendario escolar. La edil de Cultura destaca el papel que tiene la Banda en la vida cultural y social de Torrelavega y lo importante que sería reforzarla con nuevas incorporaciones, especialmente en instrumentos de «viento madera y viento metal».

Por su parte, Obeso anima a tomar parte en esta iniciativa, que permitirá a los alumnos becados adquirir formación musical, participar en los ensayos de la Banda Municipal e ir incorporándose «poco a poco» a sus actuaciones.