El Patatal de Torrelavega avanza hacia su restauración con pujas de hasta un millón de euros

El parque de Las Tablas (El Patatal) está a unos meses de renacer como un entorno verde mucho más accesible, seguro y libre de invasoras. Su ansiada restauración, uno de esos proyectos que viene anunciándose a lo largo de los últimos años, apura sus últimos trámites en los despachos del Ayuntamiento de Torrelavega, que ya escucha ofertas de siete empresas interesadas. Sus pujas son las siguientes: la más alta es la de Cuevas Gestion de Obras, que se ofrece a restaurar el parque por 1.006.113 euros; y le siguen una UTE de Senor, Fernández Rosillo y Jardinería Diego (978.254); Cannor Obras y Servicios de Cantabria (913.689); Ingeniería y Diseños Tecnicos (860.259); otra UTE de TBF Espacios Verdes y Aquaterra Servicios Infraestructuras (885.543); SIEC (857.648); y Euroservicios y Obras Forestales (811.569). La Mesa de Contratación trabaja con Medio Ambiente para elegir entre una de estas siete ofertas, con vistas a adjudicar el proyecto, firmar el contrato y, en unos meses, comenzar a ejecutar esta restauración histórica para el parque. Estas obras durarán seis meses y las financiará íntegramente la Fundación Biodiversidad -al igual que todo el proyecto 'Torrelavega Conexión Natural', donde se integran este y otros proyectos ambientales-.

¿Y en qué van a consistir estas tareas? El plan de trabajo contempla un lavado de cara integral, aunque en resumen estas acciones se pueden enmarcar en tres grandes categorías: trabajos forestales, centrados sobre todo en la erradicación de especies invasoras y la plantación de ejemplares autóctonos; la mejora de la accesibilidad en el pulmón verde, fomentando la movilidad sostenible y haciendo del parque un lugar más ameno para los vecinos con caminos, circuitos saludables y la instalación de mobiliario; y labores de creación de humedales artificiales, todas orientadas a «renaturalizar» un entorno que, como recoge este mismo proyecto y saben los torrelaveguenses, se encuentra bastante degradado y falto de un mantenimiento adecuado desde que nació como plantación experimental en manos de la extinta Sniace.

La idea es que ese pasado con raíces industriales cambie y dé paso a un futuro más enfocado al disfrute de los vecinos. Cabe recordar que el parque, mal que bien, es un espacio de uso muy habitual para muchos vecinos, desde aquellos que se despejan dando un paseo hasta los que practican deporte. La idea es que el nuevo Patatal, más accesible, abra los brazos a unos y otros, acogiendo la instalación de sendas y ofreciendo a los torrelaveguenses una faceta del entorno más amigables sin que esto afecte a su biodiversidad.

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