Mezquita confirma la intención de reabrir Sniace en septiembre

Pese a la importancia de la convocatoria, la primera tras la ampliación y con la reapertura de la fábrica en ciernes, únicamente el 26,7% del capital de Sniace (62 millones de acciones) acudió a la Junta General. Estuvieron presentes físicamente 46 accionistas y otros 330 representados. El capital social de Sniace estaba formado, antes de aprobar la agrupación de acciones, por 233 millones de títulos. Entre los asistentes se sentaron los dos nuevos consejeros, José María Castellano y Sabino García Vallina, que aceptaron in voce su nombramiento y se lo agradecieron a la junta. José María Castellano no será un consejero más; la intención de Félix Revuelta, que es el que ha propuesto su nombramiento, es que sea nombrado en breve consejero coordinador del trabajo del consejo de administración y de sus comisiones, una especie de contrapeso al poder, hasta ahora sin contestación, del propio Mezquita en Sniace.

En su intervención como apertura de la junta, el presidente de la compañía destacó el buen resultado alcanzado tras la resolución del concurso, la abrumadora mayoría de aprobación al plan de viabilidad y el éxito de la ampliación de capital. Con los trabajos de rehabilitación de la fábrica ya iniciados, según aseguró Mezquita, el horizonte del inicio de la producción en celulosa se sitúa en el mes de septiembre y diez meses después, fibras, para la que ya se están redactando los proyectos de detalle de las inversiones·.

Mezquita cerró su intervención agradeciendo la participación de los accionistas en la ampliación trasmiten un mensaje de confianza en el futuro-, la colaboración del Gobierno y la actitud de diálogo de la mayor parte de los representantes de la plantilla. La vuelta a la actividad de Sniace será pronto una irreversible realidad, concluyó.

Orden del día

Los distintos puntos del orden del día resultaron aprobados con una tónica general: los representantes del acccionista José Luis Martínez Fernández se mostraron en contra de los relativos a la gestión de la compañía y a la propuesta de sueldos de sus gestores y se abstuvieron en el resto. El marcador resultó similar en la votación de los 11 apartados: 55 millones de acciones a favor y 6,6 millones de acciones (José Luis Martínez y San José 8) votando en contra gestión de la compañía, sueldos y posibilidad de ampliar capital en el futuro- o absteniéndose, por ejemplo en la entrada de nuevos consejeros.

Fue precisamente el punto del orden del día sobre las remuneraciones del consejo una de las cuestiones a las que más extensamente se refirió Mezquita, que aseguró que la propuesta presentada reduce un 23% los sueldos del consejo con respecto a 2015 pese a lo dicho en algún medio de comunicación. En su cómputo, Mezquita obvió que su sueldo se verá incrementado por una retribución variable y que los nuevos consejeros pasarán a cobrar en dietas de una media de 25.000 euros en 2015 a 30.000 en 2016, excepto Félix Revuelta, que ha renunciado a ello. La menor cuantía global se explica porque uno de ellos, Miguel Gómez de Liaño, ha dejado de ser consejero ejecutivo y, también, de facturar a Sniace sus trabajos como abogado de la firma (191.000 euros por ambos conceptos en 2015). En total, el propio Mezquita ingresará en 2016, según lo aprobado ayer, 325.000 de salario más 30.000 euros de dietas por asistencia al consejo y comisiones, además de los gastos de representación y el uso del vehículo. A esos 355.000 euros (que en 2015 fueron 366.000) se une una retribución variable establecida en lo que resulte de aplicar un 4% de los resultados operativos del grupo del ejercicio antes de impuestos. Ni en la documentación entregada ni en la junta se facilitó a los accionistas una estimación de esta cantidad.

Ante las críticas de algunos de los presentes, (José Vía reclamó que no se suban los sueldos hasta que no se salde la deuda con los trabajadores) Félix Revuelta hizo una defensa cerrada del coste anual del consejo de administración, muy inferior a los de la mayoría de las compañías, algo que también mostró Mezquita, aludiendo a otras empresas del sector en actividad como Ence.

Todos hemos hecho un esfuerzo, aseguró Revuelta, que sostuvo incluso que Mezquita se ha rebajado en proporción el sueldo más que muchos trabajadores. Si queremos buenos profesionales y consejeros hay que pagarlos, zanjó el mayor accionista de la compañía, que intervino en varias ocasiones a lo largo de la junta.

Estas intervenciones de Revuelta sirvieron también para aminorar una de las principales polémicas de los últimos meses en relación con Sniace: la posible recalificación de los terrenos no directamente afectados por usos industriales. El máximo accionista de Sniace se mostró tajante: en estos momentos ni existe ni está sobre la mesa la posible recalificación de esos terrenos. Era una opción que teníamos como garantía para poner en marcha la fábrica en el caso de que no tuviera éxito la ampliación de capital. Ahora bien, la puerta sigue abierta para el futuro. ¿Quién nos dice se interrogó Revuelta en una conversación posterior con El Diario- que en un futuro no sea necesario ese posible ingreso para una inversión de las fábricas?.

Con la misma visión de futuro se aprobó que el consejo pueda autorizar nuevas ampliaciones de capital. Mezquita aludió en este sentido al apetito por las acciones de Sniace mostrado en la ampliación de capital. Hay gente que quiere entrar en Sniace y no ha podido y en el mercado hay un exceso de liquidez que nos puede venir bien. ¡Para qué? Pues pienso, por ejemplo, que podríamos comprar la deuda del concurso a los acreedores o hacer una inversión para integrar las dos fábricas.

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