De la Serna acusa al Gobierno de impulsar una «campaña de acoso» contra el Ayuntamiento

El alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, calificó este miercoles la recién conocida postura del Gobierno cántabro sobre el proyecto de estabilización de las playas de Los Peligros, La Magdalena y Bikinis como «un nuevo capítulo de la campaña de acoso lanzada contra el Ayuntamiento». A sus ojos, las dudas expresadas por el consejero de Medio Rural, Jesús Oria, sobre las repercusiones del proyecto en El Puntal y el estuario del Miera, ahora que la obra ya ha sido licitada por el Ministerio de Medio Ambiente, son «meramente políticas».

Oria avisó el lunes de que se estudia recurrir este plan, lo que retrasaría una obra que la ciudad lleva al menos 10 años esperando. Con ella se persigue garantizar la supervivencia de las playas citadas.

De la Serna juzga que el anuncio es simplemente político porque responderían a dos circunstancias: por un lado, «al acuerdo alcanzado por el Gobierno con sus amigos y socios naturales de Podemos, que utilizan el Parlamento de Cantabria para hacer oposición al Ayuntamiento de Santander». Por otro, a que se prolonga « la espiral de ataques a la ciudad en la que ha entrado el Ejecutivo» y que ha tenido cinco episodios anteriores: el más reciente, la amenaza de la Consejería de Cultura de llevarse de Santander el Mupac (Museo de Prehistoria y Arqueología) a otro municipio.

El alcalde lamentó esta dinámica contra la ciudad en la que «está cayendo» el bipartito de Revilla y Díaz Tezanos que, «no contento con no invertir un solo euro en Santander, ahora dedica íntegramente sus esfuerzos a paralizar las inversiones de otros». En su opinión, «es un insulto a la inteligencia que el Gobierno piense que alguien se va a creer su preocupación por un asunto por el que ni se han interesado ni han preguntado durante cerca de un año que va de legislatura».

El director general de Medio Rural, Antonio Lucio, explicó el martes que su departamento «no ha tenido acceso al informe definitivo» sobre las consecuencias que la obra tendría para El Puntal y el estuario del Miera. Dado que es preceptivo que esta consejería lo supervise, como responsable de la Red Natura 2000 en Cantabria, el caso se ha puesto en manos de los servicios jurídicos del Gobierno, que dictaminarán si procede o no presentar un recurso.

De la Serna reiteró (ya lo hizo anteayer su concejal de Medio Ambiente, José Ignacio Quirós) que en la evaluación ambiental del proyecto se incluye un informe del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex) que especifica que la actuación en las playas santanderinas no afectará directa ni indirectamente sobre el LIC (Lugar de Interés Comunitario) de las dos áreas, o sobre hábitats o especies de interés comunitario, ya que «los cambios hidrodinámicos se localizan a bastante distancia».

El alcalde recalcó que el proyecto del Ministerio de Medio Ambiente es la «única alternativa» para salvar estos arenales, porque las labores de reposición anual de arena ya no bastan para frenar un proceso que «conduce a su definitiva desaparición. «Si no se actúa, las playas de la Magdalena, Bikinis y Los Peligros serán historia», advirtió.