"No hay perros malos, hay propietarios malos"

Hoy mismo, desde las once de la mañana y hasta las cuatro de la tarde, el Pabellón Deportivo de Revilla de Camargo acoge la XIX edición del Concurso Nacional Canino de Camargo, una cita que regresa con fuerza después de cinco años sin haberse podido celebrar. Fátima Gómez es la presidenta de la Sociedad Canina Montañesa, que tiene más de 100 socios y que organiza el evento. "No hay perros malos, hay propietarios malos", sentencia cuestionada por las razas peligrosas, mientras anima a vecinos y dueños de canes a acudir y participar en el certamen, en el que habrá un premio especial para el mejor ejemplar del Valle de Camargo.

¿Por qué no se ha celebrado el concurso en Camargo en los últimos cinco años?

En el año 2012, como siempre, vinimos a Camargo para hacer el concurso. En un principio nos dijeron que sí, pero dos días antes de la cita nos lo denegaron, así que tuvimos que echar todo abajo. Nos encontramos con que no teníamos nada, así que tuvimos que ir a Loredo. El Ayuntamiento la verdad es que no nos dio ninguna explicación.

¿Cómo se ha podido recuperar?

A través de dos socias de la Sociedad Canina Montañesa que son de Camargo. Hablamos con Gonzalo Rodeño, concejal de Deportes y todo ha sido amabilidad. A raíz de hablar con él todo han sido facilidades. Estamos muy contentos, ya que somos una asociación sin ánimo de lucro.

¿Qué esperan del concurso?

Tenemos mucha ilusión. Esperamos que vengan muchos perros, pues Camargo siempre ha sido un concurso al que acudían cerca de 200 animales. Este año tal vez vengan algunos menos, pero para la próxima edición ya tenemos pensado plantearlo de otra manera.

Para los neófitos en este campo, ¿en qué consiste un certamen de este tipo?

El concurso se divide en diez grupos. Cada uno de ellos integra una serie de perros, valorados por unos jueces. En la calificación se tiene en cuenta la tipicidad del perro, el estado de la boca y su propia estética. Después es importante el movimiento, la forma de caminar, que permite ver si su estructura es correcta. A partir de ahí, se van cribando por razas y grupos. También habrá categorías infantiles y un premio especial para los perros del Valle de Camargo.

¿Cuál es la clave para criar un perro de forma correcta?

La clave principalmente recae en el dueño. No hay perros malos, hay propietarios malos. El dueño debe ser una persona tranquila y no debe tener al perro metido sólo en un sitio, sino que sociabilice. Que la gente pueda tocarlo y esté acostumbrado al contacto. Por otro lado, la selección genética es importante de cara a los concursos.

¿Qué otras actividades lleva a cabo la Sociedad Canina Montañesa?

Hacemos todos los concursos del Campeonato de Cantabria, unos siete u ocho, más la exposición nacional e internacional. Además, impartimos cursos de peluquería, de comisario de ring, de jueces... También tramitamos los pedigríes de los ejemplares.

En la presentación del concurso acudieron cuatro mujeres, ¿están ganando peso las féminas en este mundillo?

Es un mundo de hombres. Pero en la Sociedad Canina Montañesa sí que hay bastantes mujeres. Más que casualidad, es la disposición de querer trabajar. Yo en la Junta Directiva, cuando alcancé la presidencia en noviembre de 2015, no buscaba el amiguismo, sino que hubiera razas distintas y españolas. Quería compañeros con ilusión y, también, que no vean la Sociedad como una oportunidad para vender perros. Así que aquí estamos, trabajando con ilusión.

¿Qué le parece el esfuerzo de Camargo por conseguir un censo de animales domésticos y sancionar comportamientos incívicos?

Muy bien, estupendo. Tendría que ser así en todos los ayuntamientos. Es importante. La gente debe concienciarse de que tener una mascota es una gran responsabilidad y de que hay que respetar las normas de convivencia. Si tu perro mancha, pues debes limpiar para no molestar a los demás. Hay que endurecer las sanciones a aquellos que no cumplan, incluso debería prohibirse tener perros a aquellas personas acusadas de maltrato.