Genuina cocina mexicana en la calle Burgos de Santander

Los que hemos tenido la oportunidad de viajar a México en algún momento sabemos que es un país mágico, lleno de contrastes y tradiciones que se proyectan en su diversidad cultural y en su gastronomía, de las más ricas y variadas del mundo -también de las más potentes-, formando parte del verdadero alma de un país donde se come y se bebe, se ríe y se llora, a ritmo de rancheras.

Hace una década que Carolina Cisneros, natural de México DF, decidió cruzar el charco para acompañar a su marido, Guillermo Cosío, de vuelta a su tierra. Economista de profesión y gran apasionada de la cocina, especialmente de la suya, la mexicana -su madre tuvo una empresa de cáterin en México, de ahí su verdadera vocación-, durante varios años ha estado vinculada a la cantina La Terminal, en la calle Cádiz, local que mantienen cerrado por obras pero que esperan reabrir con una propuesta similar a las que ofrecen las taquerías en México, especialmente dirigidas al público que dispone de poco tiempo para comer.

La Cantina Azteca, inaugurada el pasado mes de abril, es una nueva propuesta con la que pretenden hacerse un hueco en el centro de la capital cántabra, conquistando paladares con una cocina tradicional, echa en casa, en la que la autenticidad del producto, los sabores patrios y una presentación muy cuidada, son su principal apuesta.

El local, con una pequeña terraza a la entrada, está totalmente reformado, creando un ambiente típico de las cantinas mexicanas, y las paredes se decoran con una exposición de cuadros del pintor mexicano Francisco Manríquez -si alguno les gusta pregunten porque están en venta-.

La carta está llena de sabores con irresistibles antojitos, platos distintivos y fundamentales en la cocina mexicana: tacos (cochinita pibil, al pastor, de manzana, de chuleta de tudanca, dorados de pollo con mole, de pescado, carnitas de bonito, de gambas enchipotladas, de champiñones, de nopales -solo en temporada, abril y mayo-), quesadillas (de queso, carne, con chorizo y queso, champiñones y queso, gambas), gringa, tostadas con frijoles, lechuga y aguacate o tomate (de tinga con cebolla, de pollo, gambas, champiñones, de pescado), totopos con guacamole, con queso y mixtos, con carne, gambas o chorizo y la famosa sopa azteca con torreznos, queso, aguacate y tortilla frita.

En otro apartado están los platos fuertes, enchiladas rojas o verdes, ceviche de pescado fresco de La Esperanza (corvina, lubina o rape), chiles jalapeños naturales rellenos, pescado a la veracruzana, dulces... Todo ello acompañado de salsas de elaboración 100% casera, chipotle, matcha, habanera, molcajete..., cervezas, tequilas y mezcales de importación, y las famosas micheladas y margaritas. Genuino y tradicional.