La receta del día: sopa de ajo a la montañesa
Un plato de la llamada 'cocina de supervivencia' y atemporal
Una comida o una cena perfecta cuando no hay mucho de dónde tirar en la despensa. En 'La receta del día' la propuesta de hoy ... es muy sencilla, una reconfortante sopa de ajo que, de siempre, ha sido un plato de la llamada 'cocina de supervivencia', por su sencillez y su economía. También es una sopa completamente atemporal, porque la receta se mantiene de generación en generación. Aquí, en su versión montañesa que, por otra parte, no dista de otras sopas de ajo.
Ingredientes
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4 dientes de ajo.
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2 huevos.
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Pan duro.
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Media cucharada de pimentón dulce.
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Aceite de oliva.
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Sal.
Elaboración
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1
En una cazuela de barro, calentar el aceite y freír los ajos (previamente cortados en láminas). Cuando estén dorados, retirarlos y conservarlos para luego.
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2
Cortar el pan en rodajas y freírlo ligeramente, rehogándolo bien para que no se queme.
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3
A continuación, añadimos el pimentón y el agua hirviendo.
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4
Sazonamos con sal a gusto y lo dejamos cocer a fuego suave cinco minutos.
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5
Majamos los ajos, apretándolos con fuerza con el tenedor poco a poco hasta que quede a nuestro gusto y echarlos en la sopa.
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6
Por último, batimos los huevos, los echamos en la sopa y los removemos bien antes de darle un último hervor.
Pistas y trucos
Se debe servir muy caliente y en la misma cazuela, aunque en ocasiones, se sirve en una tartera con el huevo escalfado por encima. Se puede triturar para hacer una crema porque hay gente a la que le desagrada la textura. Y, por supuesto, escalfar un huevo.
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