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Antonio 'Sane'
La flota del Cantábrico trata de «limar asperezas» con la francesa en la 'guerra del bonito'

La flota del Cantábrico trata de «limar asperezas» con la francesa en la 'guerra del bonito'

Patrones cántabros y vascos acuden a un encuentro pactado con sus homólogos galos en Guetaria para tratar el problema que les enfrenta por la costera

ELENA TRESGALLO

Jueves, 22 de febrero 2018, 07:27

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El problema que enfrenta a la flota del Cantábrico con los barcos irlandeses y franceses por las artes de pesca de los arrastreros pelágicos en la costera del bonito solo está en un momento de impás. Las heridas siguen abiertas. Precisamente, con la intención de «limar asperezas» entre flotas una representación de patrones cántabros y vascos mantuvieron ayer un encuentro informal en Guetaria con sus homólogos franceses, que faenan en caladeros comunes. No hubo ningún acuerdo a la vista para solucionar el problema de fondo, pero se dejó la puerta abierta a seguir hablando para «no ir a una guerra».

«No ha sido nada oficial», explicó ayer el presidente de los pescadores cántabros, Miguel Fernández, para describir el encuentro informal que se propició ayer entre la flota de pescadores del Cantábrico y los franceses en Guetaria. Hasta allí acudió una representación de patrones cántabros, de las Cofradías de Santoña y San Vicente de La Barquera con la intención -según su presidente- de tratar de «rebajar» la tensión existente por el conflicto de las artes de pesca de arrastre pelágico que utilizan los galos, pero también los irlandeses en la costera del bonito.

El responsable de la Federación de Cofradías explicó -antes del encuentro con los franceses- que los pesqueros cántabros continúan «sin comulgar» con el concepto de pesca que tienen estas dos flotas, aunque estén amparadas por la Unión Europea, pero situó el contexto del encuentro «extraoficial» de Guetaria para «no ir a una guerra» en la próxima costera, mantener la calma y que los barcos franceses «no se metan por medio por la noche», cuando los cántabros, los vascos o los asturianos terminan la faena.

«No ha sido una reunión oficial, sólo para rebajar tensiones y no ir a una guerra en la costera»

Miguel Fernández Presidente de los pescadores

Según ha podido saber este periódico, la reunión con los franceses se desarrolló en un ambiente «cordial», pero no hubo «ningún acuerdo», aunque sí la voluntad de seguir hablando y «no perder la línea de comunicación» establecida en el gremio. No obstante, encima de la mesa quedaron asuntos de calado, como el problema de los descartes o los controles que hacen las inspecciones de los distintos países.

El conflicto

El problema de la costera del bonito reside en las artes de pesca diferenciadas de las flotas. Mientras que los barcos españoles utilizan artes de pesca tradicional con anzuelo -que no resultan agresivas para los caladeros- los irlandeses y franceses utilizan el sistema de arrastre pelágico cuyo mayor problema son los descartes que se realizan con una gran mortandad de peces de distintas especies y que, a juicio de los perjudicados, no es un sistema de pesca sostenible que permita asegurar el futuro de la especie. Es por ello, que temen que el mantenimiento de los permisos por la UE acabe con el futuro de los caladeros de bonito en el norte. Una pesca «imprescindible» para la sostenibilidad de la flota durante el invierno, según explicó ayer uno de los patrones consultados por este periódico, para definir la magnitud del problema y las tensiones existentes.

Parada biológica

Por otro lado, el sector pesquero de Cantabria, como avanzó este periódico, no descarta, y está estudiando, solicitar la parada biológica para algunas de las especies que «más incidencia» tienen sobre su actividad para recuperar el caladero en la línea de lo que ha hecho la flota del País Vasco. «Las posibilidades están abiertas», reconoció ayer martes el consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación, Jesús Oria, al ser cuestionado por los medios de comunicación sobre esta hipótesis.

El consejero explicó que desde el Ejecutivo, concretamente desde la Dirección General de Pesca, se está intentando junto al sector «ponerse de acuerdo» y llegar a un pacto «interno» sobre las características de esta posible solicitud y las especies a las que afecta para, después, trasladarla al Ministerio «que es, en última instancia, quien tiene que dar el ok al asunto».

Al respecto, Oria opinó que «lo ideal» sería que todo el Cantábrico Noroeste -Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco- estén en las mismas condiciones para que no se produzcan «agravios comparativos». «Evidentemente, cuando el sector pesquero de Cantabria ve que un sector vecino de pesca, como es el vasco, ha podido acceder a ese tipo de estado pues los pescadores cántabros quieren igualarse en ese sentido», dijo ayer el consejero, que insistió en que su Consejería y la flota regional están trabajando «para intentar lograr lo mismo que ha conseguido el País Vasco» y no estar «en inferioridad» de condiciones sino en unas que sean «exactamente igual».

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