130 usuarios de la Filmoteca piden que se mantenga el programa de actividades

Ese colectivo de «amigos de la Filmoteca», integrado por ese largo centenar de espectadores y aficionados, usuarios habituales de lo que ha sido hasta ahora la programación de la Filmoteca, recuerdan en su escrito que desde que el pasado miércoles 23 de enero -día en que se publicó en El Diario la destitución de Enrique Bolado al frente de la entidad-, «la avalancha de reconocimientos a su labor por parte de cineastas, escritores, editores, intelectuales y el mundo de la cultura en general, ha sido abrumadora».

Señalan y matizan que, tras las diversas manifestaciones y declaraciones públicas, «no creemos que pueda añadirse nada más, únicamente aportar otro punto de vista, el de los usuarios de la Filmoteca, el de los espectadores anónimos que con su presencia dan vida a la Institución. Faltábamos nosotros».

«Que nuestra Filmoteca sea la de mayor prestigio en nuestro país, no se improvisa. Tampoco se improvisa que la valoración de los asiduos a sus proyecciones, cine club, cursos y resto de actividades sea tan notable. Este grado de excelencia no hubiera sido posible sin la erudición, pasión, dedicación y amor por el cine de Enrique Bolado». En el escrito recuerdan que «se aducen razones de eficacia en la gestión para convocar un concurso público (desde la Consejería de Cultura) que ponga al frente de la Filmoteca 'a una persona que coordine y lleve a cabo todas las labores propias de ese Centro'».

Los usuarios, en este sentido, aseguran «estar de acuerdo con ese objetivo, mejorar la gestión siempre es loable y designar a la persona más competente para lograrlo indispensable», pero subrayan que «no todo vale o, mejor aún, no solo eso vale».

Y declaran: «Queremos eficacia en la gestión de medios, pero también excelencia en la calidad de sus actividades, de esmero en su programación, de empeño en su papel difusor de cine de calidad y de formación en la historia del cine, de constancia en la creación de un espacio de reflexión».

Es por eso, -insisten- «porque no solo queremos una Filmoteca eficaz, sino excelente, por lo que esperamos que, al margen de otras iniciativas, se mantengan las actividades que hasta ahora venían desarrollándose, como el Cine Club de los sábados, coordinado por José Luis Torrelavega, las sesiones de Cine Infinito y los cursos que, desde hace años, imparte Paulino Viota». Son esas actuaciones «las que crean adeptos, las que hacen que la Filmoteca de Cantabria haya logrado el prestigio y reconocimiento del que hoy disfruta. Llegar hasta aquí ha sido lo más difícil, no entenderíamos que no se mantuviera», concluyen los integrantes de este grupo de amigos de la Filmoteca.

Según fuentes de Cultura, en los próximos días se darán a conocer los ejes de la convocatoria para cubrir la plaza de dirección de la Filmoteca. Desde esta semana la sala Bonifaz que será sometida a diversas reformas, permanece cerrada. En principio no volverá a abrir las puertas a las proyecciones hasta el mes de abril.

Los responsables del Gobierno regional anunciaron que la medida responde al modelo de gestión con éxito aplicado en otros centros dependientes de la Sociedad Regional de Educación Cultura y Deporte. El concurso público pretende «buscar a una persona que coordine y lleve a cabo todas las labores propias de este centro, con el fin de ofrecer una gestión integral más eficiente y cercana». Un concurso público y «abierto a todos aquellos que quieran optar a dicho puesto siempre que cumplan los requisitos necesarios, cuyo objetivo es disponer de una persona con dedicación exclusiva que además de diseñar un programa cinematográfico de calidad, responda a la vocación de difusión y protección del cine que rige cualquier principio de una Filmoteca, y además tenga también un perfil de gestión y administración de dicho centro con la responsabilidad que ello debe conllevar».

Además Cultura ha previsto contar con un Consejo Asesor, integrado por especialistas en esta materia, que será «el encargado de aportar ideas y asesoramiento que deberán regir las programaciones futuras, así como mantener y acrecentar su interés, para continuar con la labor realizada hasta el momento y atraer a nuevos públicos».

Todo ello, destaca la Consejería, con el objetivo de «gestionar de manera eficiente un espacio cultural que se nutre de fondos públicos, y que nos exige como responsables, hacer una gestión lo más transparente posible».