Sofía gana 'Gran Hermano 16'

Se acabó. Para alegría de muchos y tristeza de otros, 'Gran Hermano 16' se despidió el miércoles con 3.214.000 espectadores delante de la televisón, lo que supuso el 24.6% de la cuota de pantalla y, por tanto, la segunda mejor marca de la temporada.

Sofía, la pamplonesa de 19 años, se impuso -con el 60,7% de los votos- al participante vasco Aritz, de 24. La audiencia decidió que el maletín con los 300.000 euros fuese a parar a la joven que más momentos televisivos ha dado durante su estancia en Guadalix. Su mayor mérito: conseguir más minutos de cámara que su madre, la polémica Maite Galdeano, que entró a concursar junto a su hija. Eso sí, sacó tanto de quicio a sus compañeros y a la audiencia que fue la primera expulsada.

Pero Sofía ha sabido dar juego desde que entró en la casa. Tenía el secreto más difícil de ocultar: durante semanas tuvo que disimular que era hija de la habitante más excéntrica y ordinaria de la casa. Y por si fuera poco, acabó coladita de Suso, hijo ficticio de Maite durante el reality. Un papelón digno de la mejor actriz. El casanova de Guadalix se rindió pronto a sus encantos, con la misma rapidez con la que se acabó cansando de ella para liarse con Raquel, la enemiga declarada de Sofía. Este romance del catalán provocó que la pamplonesa se obsesionara con él. Sus celos y lágrimas acapararon los resumenes diarios, debates y galas. Pero entonces la audiencia expulsó al motero y la telenovela dio un giro. Salió un nuevo protagonista a escena: Ricky.

Su relación con el canario tampoco estuvo exenta de polémica. Mientras ella se metía con él debajo de las sábanas, Ricky aprovechaba para escribirse en el brazo declaraciones de amor a su 'Churraska', «su chica de fuera». Una nueva decepción para Sofía, de la que salió victoriosa. Ambos romances la convirtieron en una víctima para muchos espectadores, que empatizaban con la joven y lloraban con ella. ¿Quién no ha vivido un desamor?. Otros, en cambio, han valorado su autenticidad y capacidad de exprimir la experiencia al máximo.

Aritz, segundo finalista

Aritz se convirtió anoche en el segundo finalista del reality. Llegó a plató antes que Sofía para someterse a la entrevista de Mercedes Milá. En su charla con la presentadora, no se pasó por alto su relación con Han y su orientación sexual. Mercedes le reprochó algunas de sus actitudes en Guadalix y le pidió que fuera claro. «Creo que mi orientación sexual no le interesa a nadie», «he hecho lo que me ha dado la real gana en todo momento», recalcaba. También se negó a hablar de «su persona especial». «Desde el minuto uno dije que era una persona sin etiquetas, que no cree en el amor y sigo sin creer. En el siglo en el que estamos si no me da la gana hablar de mi orientación, no lo hago. Soy libre, esa es mi orientación sexual, hago lo que me da la gana, cuando me da la gana», declaró.

El vasco afirmó que considera que tiene con el granadino una «bonita amistad», y que en la casa «no se ha enamorado». «Si te estoy diciendo que no me he enamorado, es que no me he enamorado. Yo no tengo ninguna necesidad de mentir. En la casa he dicho en todo momento lo que estaba sintiendo. Si le he comido el rollito de primavera no tengo por qué negarlo, vengo aquí y lo digo», matizó.

En la gala, presentada por Mercedes Milá, también se anunciaron los dos primeros concursantes de Gran Hermano VIP: Rosa Benito y Rappel. Y el reality ya piensa en su edición 17. «Ganador, estoy deseando conocerte», dijo Mercedes a cámara en el emotivo discurso con el que cerró el programa.

llevó el 24,6% de la cuota de pantalla y 3.214.000 espectadores.

Ciento y un días después y con el 60,7% de la audiencia de su lado, Sofía ha entrado en el plató de 'Gran Hermano' convertida en la ganadora del concurso y feliz. Su madre ha sido la primera en lanzarse a abrazarle, pero tras ella han ido todos sus compañeros. Marta le ha dado un beso en los labios, Ricky le ha cogido en brazos y Suso se ha levantado para darle la enhorabuena y enterrar con ella el hacha de guerra.