Los reyes de las asistencias

Este Racing es el segundo equipo más goleador de la categoría con 52 goles y va a por todas. Juega con descaro, ataca con voracidad y casi siempre encuentra la forma de llegar al área rival. Y en parte eso es gracias a que cuenta con los dos jugadores con más asistencias de toda la Liga. Eso sí, el domingo enfrente estará un Levante rocoso, el cuarto equipo menos goleado de la competición, con solo 32 tantos encajados y seguramente el partido se convertirá en un choque de estilos, de planteamientos y de intenciones entre José Alberto y Julián Calero. Y en un duelo así, los detalles marcan la diferencia.

Y para agregarle más emoción, da la casualidad que será un duelo directo por el ascenso. Ambos equipos llegan con 59 puntos, con los cántabros terceros y los valencianos segundos. Ganar supone dar un paso gigantesco en la lucha por subir y en este ajedrez de precisión, Andrés Martín e Íñigo Vicente son las piezas clave que pueden decidir el partido con un chispazo, con un pase imposible que rompa líneas y descoloque al rival.

Andrés Martín no solo es el líder de las asistencias en la categoría con 12 pases de gol en 32 partidos, con una media de 0.38 asistencias por encuentro, sino que también alcanzó los dobles dígitos en goles y asistencias a principios del mes de marzo, algo que nadie más ha conseguido en Primera y Segunda División esta temporada. No es un simple pasador, es un generador de fútbol capaz de marcar la diferencia tanto en la construcción como en la finalización. Su capacidad para filtrar balones entre líneas es un problema constante para las defensas rivales y con él en el campo, el Racing siempre tiene un plan, una vía para desarticular al rival.

Su sociedad con Íñigo Vicente ha sido clave para que el Racing sea uno de los equipos más atractivos de la temporada. Vicente ha repartido nueve asistencias en 31 partidos, con una media de 0.29 asistencias por encuentro, un número que lo coloca en la élite de los pasadores, eso sí, empatado con Carracedo del Córdoba, que también suma 9 asistencias pero en 32 partidos, con una media de 0.28. Vicente es un futbolista con duende, un jugador que tiene algo especial en cada contacto con la pelota y que a pesar de haber atravesado un pequeño bache de rendimiento, demostró ante el Zaragoza la pasada jornada que quiere estar de nuevo a su mejor nivel. O al menos intentarlo.

No necesita mucho espacio para inventar, para sacar un pase inesperado o para encontrar una grieta en la defensa contraria con esa capacidad para aparecer en los momentos decisivos, algo que lo convierte en un futbolista imprescindible. Su entendimiento con Andrés Martín es uno de los más productivos de la Liga. Cada uno ha dejado su huella en momentos clave de la temporada. El andaluz inauguró su cuenta de asistencias contra el Eibar, sirviendo un pase perfecto a Suli antes de marcar él mismo desde el punto de penalti. Su conexión con Arana ha sido letal, como en Tenerife o ante el Málaga, donde asistió en dos córners. Ha servido balones medidos para Pablo Rodríguez, como en Zaragoza y Riazor, y ha encontrado a Karrikaburu en varias ocasiones.

Íñigo Vicente, por su parte, ha sido clave en partidos decisivos. En el Racing-Sporting filtró un pase milimétrico para Michelin, que definió con sangre fría. En Ferrol habilitó a Andrés Martín para un gol crucial y su sociedad con Arana también ha sido prolífica, con asistencias en Cádiz y Riazor. Incluso ante el Zaragoza firmó un doblete de asistencias, primero con un córner preciso para Pablo Rodríguez y luego cediendo un balón a Andrés Martín para que anotara.

Los números están ahí, pero lo mejor ambos jugadores es cómo transforman partidos con su talento. Entienden el juego, se anticipan a lo que va a pasar y hacen mejores a sus compañeros. Cuando el balón pasa por sus pies, algo bueno va a suceder. El domingo, ante el Levante, los focos estarán sobre ellos. En un partido de tanta tensión, cada pase puede ser decisivo para desarticular a los valencianos. No hay margen de error. El Levante es un equipo sólido, rocoso, con una defensa difícil de batir y seguramente planteará un partido complicado para el Racing. Pero si alguien puede poner un balón justo donde debe estar es esta pareja de racinguistas. Son los reyes de la asistencia y en el Ciutat de València tienen la oportunidad de demostrar por qué.