Djokovic admite que fue a una entrevista con covid y que hubo «errores» en los documentos de inmigración

En la prueba PCR realizada en su país y presentada por Djokovic a su llegada a Australia aparece un resultado positivo. Sin embargo, el periodista Ben Rothenberg, colaborador habitual del 'New York Times', comprobó que al escanear por primera vez el código QR que aparece en esa página el resultado salió negativo. De inmediato, difundió esa contradicción a través de las redes sociales. Y, sorpresa, al volver a realizar la operación con el código QR el test ya dio positivo. La sospecha de manipulación queda en el aire.

A eso se añaden las imágenes del tenista sin mascarilla y en compañía de niños sólo un día después de haberse sometido a esa PCR. «Era asintomático y me sentía bien y no recibí la notificación de mi test PCR positivo hasta después de ese evento (con jóvenes)», ha precisado en un comunicado publicado en las redes sociales donde da su versión de todo lo ocurrido.

También, la sesión fotográfica y la entrevista que concedió al periódico deportivo 'L'Equipe' el 18 de diciembre, dos jornadas más tarde del supuesto test positivo. «Me sentí obligado a acudir a la entrevista con L'Equipe para no dejar tirado al periodista, pero mantuve distancia social y mascarilla todo el tiempo, excepto durante las fotografías. Al regresar a casa me aislé y reflexioné. Cometí un error de juicio y admito que tuve que posponer la cita», ha apuntado.

No es la única duda por resolver. En la documentación para entrar en Australia, Djokovic aseguró que no había viajado a ningún país durante las dos semanas anteriores. Pero hay vídeos de su estancia en Marbella, uno de sus campos de entrenamiento habituales, en Sotogrande. El tenista, en su defensa, jura que ese documento lo rellenó la Federación Australiana de Tenis. Mentir en un trámite así se considera delito.ç

La explicación que ofrece es que fue un despiste de su equpo de apoyo. «Mi agente se disculpa por el fallo administrativo que cometio. Fue un error humano en ningún caso deliberado. Vivimos tiempos difíciles, en medio de una pandemia de alcance global, y esos errores puede darse ocasionalmente», justifica el tenista serbio.

Cuándo tomará la decisión el Gobierno

Con estas cuestiones por resolver, el Gobierno de Australia tiene previsto anunciar hoy su decisión final sobre el 'caso Djokovic', que divide a la opinión pública de un país que presume de ejemplo en la lucha contra la pandemia, aunque a la vista de las explicaciones, toddo podría volver a retrasarse. La ciudad de Melbourne, donde se encuentra ahora Djokovic, ha estado nueve meses en estricta cuarentena. Las medidas anticovid han supuesto un desgaste para el Gobierno, que tiene que decidir ahora sobre un 'caso Djokovic' que puede estallarle en las manos.

La Asociación Profesional del Tenis (ATP) se apartó ayer del tenista serbio y defendió la vacunación. «Esta asociación continúa recomendando firmemente la vacunación de todos los jugadores. Es esencial para nuestro deporte en tiempos de pandemia. Esto está basado en evidencias científicas y supone beneficios para la salud», explicó en un comunicado en el que también aclaró que la exención médica presentada por Djokovic se hizo «de manera independiente a la ATP.