Camargo ultima el convenio del cubrimiento, que «seguramente» no arrancará hasta 2022
El Ayuntamiento confía en el compromiso del Gobierno regional para consignar el presupuesto «una vez que la obra se vaya a poner en marcha»
El Ayuntamiento de Camargo sigue intentando acelerar la llegada de uno de los proyectos más importantes de su hoja de ruta municipal: el cubrimiento de las vías de tren a su paso por el casco urbano de Maliaño-Muriedas. ... El equipo municipal confía en la firmeza del compromiso adoptado por el Gobierno de Cantabria para desarrollar el plan lo antes posible, un pacto que se encargó de ratificar hace poco más de un mes el consejero de Obras Públicas, José Luis Gochicoa, en una reunión con la alcaldesa, Esther Bolado. «Estamos trabajando en la firma del convenio», avanzó la regidora, quien a inicios de septiembre esperaba que las obras comenzarán a finales del año entrante. Otra cosa es que los planes lleguen tan pronto como quieren en el valle. Cuatro meses después, la posibilidad de que las máquinas empiecen a cavar el soterramiento el año que viene está casi descartada por Bolado, quien ya estima «que seguramente en 2021 las obras no se podrán iniciar».
Hasta que ese momento no llegue «sería absurdo» que los Presupuestos de Cantabria reservaran una partida para el cubrimiento, como declaró la alcaldesa este pasado fin de semana en respuesta a las dudas arrojadas por el PP en relación a la promesa del Gobierno autonómico para «cumplir con su parte del compromiso» -más avanzado en Torrelavega-. Fechas y comparaciones al margen, el equipo municipal de Camargo confía en la palabra del Gobierno de Cantabria. «Lo importante es que tenga reflejada la consignación presupuestaria cuando se vayan a poner en marcha las obras, como así nos lo ha ratificado el consejero Gochicoa», replicaba Bolado, antes de concluir que, entre tanto, «es mejor que el dinero se dedique a actuaciones que ya están en marcha».
Todo bien mientras el encargo municipal no se diluya entre las decenas de proyectos y solicitudes que baraja el Ministerio por parte de otras comunidades autónomas. Desde que se esbozaron los primeros planos en la sede municipal, el equipo de gobierno se ha volcado en hacer escuchar tanto en Peña Herbosa como en Moncloa. Los objetivos han pasado de concertar cada cita hasta, sobre todo, apuntalar todos los detalles de un proyecto que cuesta cerca de 9,5 millones de euros.
De eso también tienen dudas los populares de Camargo, con Amancio Bárcena a la cabeza: «La alcaldesa no ha sabido hacer valer la reivindicación de los vecinos», lamentó el líder del PP en contraposición a la labor del regidor de Torrelavega, Javier López Estrada, quien, «tras tan solo un año al frente, ha logrado una financiación cien veces superior para una obra similar».
En dos fases
El Ayuntamiento contempla el proyecto al menos en dos fases. La primera, valorada en cinco millones de los que se encargaría exclusivamente el Gobierno de España, se refiere al cubrimiento en sí mismo, a la construcción de una losa a modo de «cajón» de 274 metros de longitud para cubrir las vías desde el puente de la calle Rufino Ruiz Ceballos y el parque Lorenzo Cagigas. El segundo paso, ya asumido por el Consistorio, costará unos 4,5 millones y estará enfocado exclusivamente a la transición y urbanización de ambas márgenes mediante «dos viseras laterales».
Y ahí es donde toca hablar de la financiación. Camargo quiere acordar un nuevo reparto del montante total de la obra, y pone como ejemplo los esquemas para la integración ferroviaria de Santander o el soterramiento en Torrelavega: el 50%, el Ministerio; 30%, el Gobierno de Cantabria y un 20% el Consistorio.
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