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Laredo saca su lado hippie
La villa regresa a los años 60 y 70 con un colorido desfile
Pelucas llamativas, flores en el pelo, pantalones de campana, flecos y muchas ganas de pasarlo bien: esos fueron algunos de los ingredientes más repetidos ayer ... en el desfile de la última edición de Laredo Hippie, un festival que ha convertido durante cuatro días a la villa pejina en un santuario de paz, amor y música de décadas pasadas. Miles de personas, muchas de ellas ataviadas con prendas psicodélicas, collares de cuentas y gafas redondas, entre otros accesorios rimbombantes, participaron en esta cita que ya es todo un clásico del verano cántabro.
La jornada de ayer arrancó con la ya tradicional concentración de coches clásicos organizada por Making Legends, que llenó las calles de Laredo de joyas rodantes imposibles de ignorar, tanto por la singularidad de los modelos como por la animación que aportaron. Pitidos, música y conductores con disfraces tan divertidos como llamativos. Así, los clásicos desfilaron ante el entusiasmo del un público que, cámara en mano, no dudó en inmortalizar la estampa que se repite en la localidad cada julio.
En torno al mediodía, el ambiente siguió con la animada sesión vermú a cargo del DJ Chema Armengou en el parking del Juzgado, y ya por la tarde, a las 19.00 horas, los motores volvieron a rugir con la reanudación del recorrido de los coches clásicos, mientras en la Alameda Miramar empezaban los acordes del grupo Music Time Machine, que calentaron el ambiente de cara a uno de los momentos más esperados: el gran desfile de comparsas y agrupaciones. A las 20.30 horas, el colofón del festival se materializó con numerosos grupos disfrazados que desfilaron con alegría por la Alameda Miramar, como queriendo devolver a Laredo a su época dorada, cuando una pacífica 'colonización' francesa transformó la villa pejina en un lugar más moderno impregnado en el espíritu hippie y una efervescencia cultural que cambió para siempre su historia y que, verano tras verano, recuerdan con cariño.
Los coches clásicos pusieron animación a las calles y no pasaron desapercibidos durante toda la jornada de ayer
Con una temperatura suave y un cielo cubierto que amenazaba lluvia pero respetó la cita, el pasacalles se desarrolló tal y como estaba previsto. Los disfraces de los participantes eran auténticas obras de arte con el ingenio por bandera y la clara intención de seguir impresionando al público en cada edición como si fuera la primera. Con todo, los asistentes se dejaron llevar por el frenético ritmo del desfile y acompañaron con sus voces la música de las comparsas.
A la conclusión del recorrido, el homenaje musical a la década dorada continuó con un tributo a The Beatles, seguido de la entrega de premios a los mejores disfraces individuales y por agrupaciones. Como broche de oro a la jornada, La Década Prodigiosa puso a bailar a todos con sus versiones.
Programación de hoy
El festival Laredo Hippie pondrá hoy, domingo, el punto final a esta edición con una programación igualmente animada y para todos los públicos. Desde primera hora, los pasacalles y espectáculos callejeros continuarán recorriendo la villa, llevando la música a cada rincón.
A las 13.00 horas, el DJ David Gaya ofrecerá una nueva sesión vermú en el parking del Juzgado, ideal para despedir el fin de semana y, ya por la tarde, a las 20.00 horas, llegará el concierto de versiones de Lost in Covers, seguido a las 21.30 horas por la sesión ye-yé de Víctor Calvo, que servirá como cierre para el concurrido festival que es ya un evento ineludible en el verano de la Cantabria oriental.
Durante toda la jornada continuarán las actividades paralelas, como la zona gastronómica internacional en el parking tras el Juzgado, la zona infantil en la Alameda Miramar y el ambiente único que se crea en Laredo cuando viaja en el tiempo para reencontrarse de manera relámpago con el boom de su historia.
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