Los túneles de Ocharan, casi a punto

Los castreños podrán circular por la calle Leonardo Rucabado a partir del próximo 31 de enero, a través de los dos túneles que se encuentran en estos momentos en la recta final de construcción. Tras doce largos meses desde que se echaron a andar las obras de los túneles de Ocharan, el 5 de febrero del pasado año, y con el coste de la obra de 809.652 euros, las estructuras serán realidad en menos de dos semanas, por lo que los vehículos circularán por el túnel más grande, mientras que por el pequeño, que discurre de forma paralela a éste, podrán desplazarse los peatones y los ciclistas. Los plazos aprietan, pues el Ayuntamiento castreño solo podrá beneficiarse de la subvención regional solicitada, valorada en 600.000 euros, si las actuaciones finalizan el último día de este mes.

El concejal de Obras y Urbanismo, Alejandro Fernández, explicó a este periódico que el túnel que va a ser peatonal y que el carril bici está «prácticamente terminado, a falta de aspectos eléctricos e iluminación». En el otro túnel, añadió el edil, «ya se han hecho las estructuras de hormigón, se ha desencofrado, quitado los puntales, y se está haciendo la instalación de gas, pasando las tuberías de abastecimiento de agua y el relleno».

Por otro lado, Fernández anunció que las obras de asfaltado están previstas para los días 23 y 24 de enero. «Posteriormente quedaría la señalización horizontal, la vertical y pintar el vial. Hay que conectar las luminarias y el alumbrado y con eso las actuaciones habrían finalizado y los túneles estarían listos para su inauguración», explicó Fernández.

Para que las obras finalicen este mes y el Ayuntamiento pueda recibir la mencionada subvención del Gobierno regional, los operarios están trabajando todos los días, incluidos los festivos y se ha incorporado más trabajadores por parte de la empresa contratista durante el último mes y medio, a cargo de la misma. Esto «es algo que está dentro del coste del modificado que se aprobó en agosto, lo que ha pasado es que el plazo de ejecución de la obra se ha alargado por inclemencias climáticas que impidieron realizar las estructuras de hormigón», aseguró Fernández, destacando que, de haber acompañado el tiempo, éstas se podrían haber construido en noviembre, pero que la mayor parte de la estructura no se ha podido hacer hasta primeros del presente mes de enero.

Con todo esto, el edil destacó que el 31 de enero se deberían finalizar las obras para poder inaugurar los túneles en febrero, abriendo los viales al tráfico. «Esta es la previsión que manejamos ahora mismo si no surgen complicaciones de última hora y se tuerce. Cuando se termine la obra ya se podrá circular y se utilizará de forma normal por parte de los peatones, los vehículos y los ciclistas. Las señales de obra se quitan y se elimina la pintura amarilla de la calzada para derivar el tráfico por la calle Menéndez Pelayo, pintándola de negro y también se pondría la señalización definitiva, todo ello en los últimos días de este mes», apuntó el edil

«Por fin se ve la luz al otro lado del túnel, como dice la expresión. Ha costado mucho esfuerzo. La verdad es que no nos encontramos el estado de estas obras de las mejores maneras al inicio de la legislatura; estaba paralizada y ha costado bastante ponerla en marcha de nuevo. Nadie ha estado a gusto, ni la dirección de obra, ni el contratista y ha habido que dejar de contar con los servicios de la dirección de obra y todo este mes ha sido dirigida por un técnico municipal, necesitando personal propio a tiempo completo. Esto ha supuesto que los técnicos de Urbanismo han tenido que estar a tiempo completo y no están pudiendo hacer otras cosas, lo que afecta al funcionamiento del departamento, pero se ha tenido que hacer lo necesario para terminar las obras a tiempo», reconoció el concejal, añadiendo en este sentido que las obras de los túneles de Ocharan «han dado mucho más trabajo del que podían haber dado y se hubiesen llevado con más normalidad si la tramitación previa se hubiese realizado correctamente, con un proyecto que no tuviera que ser modificado, sin un contratista que no estuviese tan apretado con el presupuesto».

También comentó el edil que la decisión del equipo de gobierno de la anterior legislatura (CastroVerde) solicitó la subvención al Gobierno de Cantabria, lo que ha llevado a estar «muy apurados» por no cumplir con los plazos que se tenían que cumplir. «Hubo que pedir una prórroga de los plazos de la propia subvención y eso ha metido más presión todavía en poder acabar la obra a tiempo», reconoció.

Por último, el concejal quiso dejar claro que la gestión de estas obras ha sido una labor de la alcaldesa castreña, Susana Herrán. «El proceso ha sido muy difícil, ya conllevado muchas preocupaciones. Las tramitaciones han llevado más de quince años, pero los túneles de Ocharan eran muy necesarios. Finalmente va a ser una realidad, más tarde de lo que nos hubiera gustado, porque queríamos que estuviese listo hace meses y ya estamos en enero de 2020», concluyó.

Después de resolver el contrato de una primera adjudicación fallida, las obras de los túneles de Ocharan fueron adjudicadas el 28 de diciembre de 2018 a la empresa Misturas Obras e Proxectos, con un contrato que se firmó el 9 de enero de 2019, comenzando las obras el 5 de febrero del mismo año, con un plazo de ejecución de seis meses. Tal y como recordó Fernández, la empresa venía indicando verbalmente discrepancias con las obras proyectadas, presentando a finales de marzo un informe en el que se indicaban las deficiencias del proyecto. «Posteriormente, el 3 de abril solicitó la suspensión de las obras hasta que se tramitase un modificado del proyecto que definiera los nuevos trabajos necesarios para poder ejecutar la obra y fijara los precios de dichos trabajos», señaló el concejal, para después añadir que, ante la negativa de la Dirección de Obra a esta solicitud de suspensión, se produjo una primera paralización de las obras con fecha 15 de abril.

Además, el edil recordó que con el compromiso por parte del Ayuntamiento de tramitar el modificado del proyecto, Misturas reanudó las obras el 13 de mayo y que el 14 del mismo mes se autorizó por la Alcaldía la redacción del modificado a los redactores del proyecto. Así, «el modificado se presentó el 17 de mayo, pero no llegó a tramitarse por parte del equipo de gobierno anterior». El 14 de junio, un día antes del Pleno de investidura, la empresa Misturas paralizó nuevamente las obras por no contar con la tramitación del proyecto modificado. Tras la modificación, las obras se reanudaron en septiembre y el Ayuntamiento solicitó una prórroga en el plazo de ejecución, pasando del 31 del octubre de 2019 al día 31 de este mes para poder hacerse con la subvención del Gobierno regional.