El Ayuntamiento de Santander modifica la obra de Isabel II para garantizar la seguridad

A petición del Jefe del Servicio de Vialidad, se ha redactado un informe que asegura que no se puede ejecutar la parte de la intervención que discurre junto a las obras del nuevo edificio administrativo de La Paz. La ejecución en ese punto concreto se cambia porque no se pueden garantizar las condiciones exigibles de seguridad. Las intervenciones en este edificio comenzaron en octubre y ya está ejecutada el 40% de la obra. En los próximos meses se llevarán a cabo los cerramientos de las ventanas, las instalaciones interiores y la fachada exterior, así como la finalización de los trabajos de albañilería.

El concejal de Fomento y Vivienda, César Díaz, detalló que las obras terminarán antes del verano. Estas intervenciones en el inmueble impiden que se pueda realizar la renovación de la calzada en ese punto de la manera que se había diseñado en un primer momento y la modificación del proyecto supone tener en cuenta las obras que se están desarrollando en dicha calle para ampliar el perímetro de seguridad. Algo similar se produce en la esquina con Francisco de Quevedo, ya que un edificio de la Plaza de Los Remedios presenta, en todo el perímetro, un andamio por desprendimiento de parte de la fachada.

Además de estos dos cambios puntuales que se deben realizar en el proyecto por las obras en sendos edificios, el informe del Jefe de Servicio de Vialidad también refleja la eliminación de la parada de taxis, que obliga a recuperar la alineación de principio a fin de la calle, la necesidad de reforzar la señalización provisional durante la ejecución de las intervenciones y otros ajustes menores. El documento indica que la modificación que se realice no superará el 20% del precio primitivo del contrato, que contaba con un presupuesto de 844.117 euros.

Las obras en la calle Isabel II están actualmente paradas porque los comerciantes y el Ayuntamiento alcanzaron ese acuerdo en el marco de las vacaciones de Navidad. Hasta el 10 de enero la vía estará libre de maquinaria para favorecer el tránsito de vecinos y visitantes por esta céntrica zona. Pero no es el primer contratiempo que sufre. En verano también se suspendieron temporalmente las obras para evitar molestias en la época estival.

Las intervenciones, divididas en tres tramos, ya se encuentran en el último trecho, el que corresponde con el espacio situado junto al centro de salud. En los dos primeros tramos de la calle, ya finalizados, se ha ensanchado la acera y se han reducido a dos los carriles de circulación. Además, se ha plantado nuevo arbolado, en sintonía con la intervención prevista en el resto del vial. En el tramo comprendido entre las calles Calderón de la Barca y Cádiz se ha reforzado el alumbrado, que ya se encuentra en servicio, tal y como solicitaron los comerciantes durante la redacción del proyecto.

El documento de renovación urbana de Isabel II planteó intervenciones diferentes en los distintos tramos, en función de las necesidades detectadas en cada uno de ellos y de las mejoras de las que han sido objeto las calles adyacentes.

El proyecto incluía también la intervención en la manzana delimitada por Isabel II y las calles La Paz y Francisco de Quevedo, que es el punto donde se ha tenido que modificar el documento. Ahí se mejorará la urbanización con al ensanche de las aceras y la colocación de pavimento de adoquín de granito.